Capítulo 1

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En Yunmeng los días son movidos al igual que las aguas de sus ríos y ni que decir de su gobernante, conocido por su peculiar carácter y codiciado por su posición y belleza, muchos valientes han intentado domar a tal bestia pero ninguno es lo sufic...

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En Yunmeng los días son movidos al igual que las aguas de sus ríos y ni que decir de su gobernante, conocido por su peculiar carácter y codiciado por su posición y belleza, muchos valientes han intentado domar a tal bestia pero ninguno es lo suficientemente capaz para ello y tanto su Consejo Real como súbditos temen que no exista nadie en ese mundo que pueda con tal tarea.

Es por eso que el Consejo Real del Clan Jiang conformado por Wen Qing, Wen Ning y Wei WuXian como Médico Real, Maestro de Armas y Mano Derecha, se encuentra reunido en una sala privada para hablar acerca de asuntos sumamente importantes, conseguir que su regente se comprometa.

Pero dicha reunión es interrumpida por el mismo Rey Tigre Jiang WanYin, quién irrumpe en la habitación con paso decidido y toma asiento a la cabeza de la mesa, su Mano Derecha Wei WuXian trata de hablar pero es silenciado con una simple mirada.

- ¿Se puede saber por qué se encuentran reunidos sin mi? - Cuestiona y fija su mirada en los otros dos consejeros.

- N-no era nuestra intención, Su Majestad - El Maestro de Armas se apresura a excusar.

- ¿Y entonces cuáles eran sus intenciones? - Apremia y alza una inquisidora ceja a la espera de una respuesta.

- Sólo hablábamos de cosas cotidianas, por eso no te llamamos - Wei WuXian le resta importancia, encogiéndose de hombros.

- Ya veo - Suspira con resignación - ¿Cómo van las cosas en la Capital? - Pregunta en cambio.

- Según mis informantes, los ataques se han reducido bastante al igual que el desempleo y el hambre - Se apresura a responder su Mano Derecha, pasándole un informe - Bastante impresionante, Hermanito - Comenta juguetonamente.

- Cierra la boca, Wei WuXian - Sisea entre dientes - ¿Y los pueblos vecinos? - Inquiere, leyendo rápidamente el documento.

- B-bastante bien, Su Majestad - Comienza Wen Ning con vacilación - La producción agrícola y pesquera han ido en aumento, como son las actividades más predominantes en Yunmeng, es más fácil de administrar - Dice con un poco más de seguridad pasándole un informe.

- Eso es bueno - Asiente el Jiang y mira directamente al Maestro - Ten más seguridad en ti, la necesitas para que los demás te respeten - Aconseja y recibe un asentimiento del contrario.

- ¿Seguridad? - Bufa la Médico Real - A-Ning necesita endurecerse, es muy blando y por eso las personas lo pisotean - Wen Qing le da una mirada afilada a su hermano - Sin contar que somos Wen, ya de por sí nos odian - Se cruza de brazos y se dirige al Rey - Con todo respeto, pero nunca nos aceptarán, Su Majestad - Sentencia.

- Lo hacen, Wen Qing - El Rey suspira y le devuelve la mirada - Mi gente sabe que confío en ustedes, así que ellos también lo hacen - Le asegura sin romper el contacto visual - Sean pacientes - Agrega.

- Su manera de vernos demuestra lo contrario - Contrarresta la mujer.

- ¿Quieres que te recuerde el por qué? - Gruñe el contrario, irritado.

Cortejo (XiCheng)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora