𝐁𝐚𝐣𝐨 𝐋𝐚 𝐌𝐚́𝐬𝐜𝐚𝐫𝐚 𝐃𝐞𝐥 𝐑𝐞𝐲 ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿ

Capítulo XIII

-Señor, he escuchado su petición y demás "consejos" pero me niego, ante ello, así que su petición es rechazada. - dijo Jungguk ocupando lugar en su salón.

-Pero mi rey-

-¡He dicho que no! - sentenció.

Aquel grito hizo que las personas presentes se sobresaltaran ligeramente.

-De acuerdo, gracias por su tiempo mi rey - dijo el anciano, dirigiéndose a la salida junto al resto del consejo.

-¿Se le ofrece algo majestad? - preguntó Joshua.

-Fuera de mi vista, necesito privacidad - ordenó Jungguk fríamente.

Joshua sin titubeos, salió del salón, dejando solo a Jungguk nuevamente.

Al quedarse solo, se recargo sobre su escritorio y al girar su cabeza, se encontró nuevamente con su rostro en aquella pintura, que jamás debió ser pintada.

Solo reflejaba su dolor y su pena.

Trató de ser consciente la mayoría del tiempo, sin embargo, sabía que todo era una cruel pesadilla de la que quería despertar. Algo dentro de él se lo impedía. Era difícil siquiera pensar en si mismo, su mente nublada y aquellas voces que le hablaban eran tan crueles y duras. Era como un castigo. Sintió una punzada en su corazón, ignoradolo inmediatamente, creyendo que somo era a causa de los recuerdos, pero sin saberlo... aquello que lo controlaba no sólo era el veneno, sino que Joshua controlaba un muñeco boodu.

¿En qué momento la gente que amaba se había ido de su lado de la noche a la mañana, dejándolo solo a su suerte?

Cerro sus ojos para descansar un poco, se sentía cansado y con sueño.

Aún se preguntaba el por qué seguía vivo, por qué no simplemente escapó también o ¿por qué... no solo se quito la vida? Si vivir aquello era lo último que quería.

Al cerrar sus ojos, pudo viajar en vagos y viejos recuerdos, en los cuales estaban sus padres y estaba Jimin.

Jimin.

Jimin.

Sólo Jimin.

-¡Jungguk, despierta! - aquella voz le hizo reaccionar inmediatamente.

-¡¿Por qué diablos gritas Taehyung?! - cuestionó sobresaltado

-Es Jimin.

-¿Jimin? - se mostró extrañado.

-Sí, Jin dice que lo ha visto en sus sueños, como si pidiese ayuda o algo así - explicó Taehyung.

Y aquello había desilusiónado al rey.

-Son sueños... Es normal que todo el mundo tenga sueños, incluso yo tuve sueños donde aparecían Jimin y mis padres. ¿Qué quieres que haga? ¿Esperanzarme de un estupido sueño? Ya no más Taehyung, este es el mundo real... y tenemos que despertar.

-Pero esta- - y en aquel momento, el destello verde se hizo presente en la mirada enfurecida.

-¡Jimin esta muerto para mi! ¡Me dejó, se fue con otro bastado, escapó y me condenó a esto Taehyung! - gritó en ira.

-Jungguk eso no es real, todos aquí en el castillo sabían que ustedes eran inseparables, jamás salió del pueblo y si lo hacía solo era para lo que se necesitaba aquí en el castillo, tú mismo me lo dijiste, la gente lo veía. Tal vez solo-

-Tal vez solo fue un engaño. Tal vez aquellas veces que iba, salía a ver a ese tipo. Y yo... y yo creí todas esas mentiras. Me dijo que me amaba ¡me miró a los ojos, Taehyung! ¡Y al final, solo me escribió una maldita carta donde solo me dijo que nunca lo hizo, me vio a la cara y fue tan descarado en engañarme, en usarme, en jugar conmigo, mis sentimientos! ¡Fui un idiota y un ingenuo por creerle cada una de esas mierdas! - la presión en su pecho era inexplicable, esa voz lo estaba controlando.