-Quisiera que las cosas que te hice no hubieran pasado, sé que no eres la única persona que me ve como una escoria, pero no tenía opción, no podía seguir controlándome cuando al fin te tenia cerca luego de tantos años-
-¿De qué hablas? Si tú y yo ya habíamos...-
-¿Tú y yo? ¿No lo recuerdas?-
-..........-
-¿No sabes cómo saliste de ese lugar?-
-.............-
-La noche que te llame por tu nombre "Yibo" fue la primera y la última vez que nos vimos ¿Recuerdas el sonido de los bomberos?-
-¿Bomberos?-
Y al igual que estar viendo una película, las imágenes y sonidos de esa noche volvieron a él. El pequeño joven "Alfa" acaricio el sucio cabello del "Omega" que continuaba en silencio, su rostro parecía reflejar felicidad, solo era un nombre, pero en su interior sentía que había adquirido una nueva identidad.
-¿Por qué sigues en este mugroso lugar?-
-........-
-Yibo responde-
-No... no tengo familia... nadie quiere a un perro de la calle...-
-¿Un perro? ¿Tú? ¿Qué tonterías dices?-
-Además... la señora de este lugar jamás me dejaría, ahora que soy un Omega, quiere venderme al mejor Alfa que encuentre y tú eres solo el primero-
-¡Oye niño! ¡Deja de hablar tonterías! ¡Tú ya eres mío y eso nos convierte en familia!-
-¿Soy tuyo?-
-Claro que si-
-Pero eres solo un niño igual que yo, no puedes ni siquiera hacer que me saquen de aquí-
-¡Eso no es verdad! ¡Ya verás!-
La voz del pequeño Xiao Zhan sonaba molesto, el niño no quería que lo vieran como una criatura diminuta, se sentía como un adulto y deseaba con todas su fuerzas que la persona que tenía frente a él, lo reconociera como alguien valiente y encantador.
Yibo vio como el jovencito antes de irse, camino hacia él, juntando repentinamente sus labios con los suyos en un fuerte beso, que lo dejo completamente sorprendido, sus anteriores clientes solo se enfocaban en la parte baja de su cuerpo y la manera de insertar cosas en su c*lo, por lo que era la primera vez que sentía los labios de otra persona, así como la extraña sensación de juntar su lengua con otra.
El extraño "Alfa" observo a Yibo con ojos avergonzados, su rostro estaba rojo y sus manos temblaban, tomar la iniciativa nunca había sido algo tan difícil como en ese momento. El "Omega" finalmente vio como el joven abandonaba la habitación, sin realizar el más mínimo ruido espero, su tobillo ya se encontraba completamente adormecido por las cadenas, pero por mucho que lo intento no logro sacarlo y solo quedaron pequeños cortes que delataban lo que había intentado hacer.
-No esperes nada... siempre... te quedaras aquí...-
La felicidad de recibir un nombre, solo fue pasajera, el pequeño niño nuevamente había comenzado a luchar con los pensamientos de abandono y las ganas de acabar con su vida, los pensamientos negativos eran demasiado fuertes y recurrentes para un joven de su edad ¿Pero qué otra cosa podía hacer? Las fantasías seguían siendo mejor que su realidad, incluso si estas fantasías no eran buenas.
-¡Fuego! ¡Fuego! ¡Corran!-
Los gritos desesperados de sus compañeros, hicieron que su corazón se detuviera unos segundos. Los fuertes pasos de las personas corriendo por el lugar, le causaba terror, mientras el fuerte olor a humo comenzaba a llenar la habitación donde se encontraba.
-¡Estoy aquí! ¡Alguien por favor!-
Los gritos desesperados del niño eran ahogados por el ruido de las sirenas de los bomberos. El edificio ya estaba por consumirse en el fuego y los vecinos estaban sorprendidos ¿Por qué un grupo tan grande de niños se encontraban en ese lugar? La dueña no dijo ninguna palabra cuando la policía comenzó a llegar y la tomaron arrestada, su pequeña y segura mina de oro en un parpadeo se volvió ceniza.
Las fuerzas del "Omega" se estaban agotando, sus piernas ya no podían permanecer en pie, mientras que sus pulmones luchaban por conseguir oxígeno. Inclusos cuando las ventanas se rompieron y la voz de alguien se acercó a hablarle, él no pudo pronunciar la más mínima palabra y solo quedo la cálida sensación de ser cargado por una persona.
-¿De verdad tú hiciste eso por mí?-
Esas palabras salieron de inmediato, nunca antes había recordado con tanta claridad lo que había sucedido aquella noche. La necesidad nunca estuvo, solo enterrarlo era lo mejor, pero por primera vez se sentía feliz de cosas relacionadas con su juventud.
-Lo hice porque lo sentí-
-¿Sentiste?-
-Creo que lo sabias, pero esa habitación desprendía un insoportable olor a neutralizador-
-Ella no podía permitir que tú me marcaras, era una forma de prevenir... era por eso...-
-Pero no funciono-
-¿De qué hablas?-
-En el momento en que te vi, mi cuerpo lo único que quería era coger contigo, no me importaba nada, solo te quería a ti, pero cuando hable contigo, supe que no habría una próxima oportunidad donde nos viéramos y la simple idea me desespero-
-Y por eso provocaste el incendio....-
-Por lo menos debía asegurarme que ya no estuvieras en ese horrendo lugar-
-Gracias... Y la verdad es que si lo sentí, lo mimo que tú pero... cuando te volví a ver con mi hermana, la excitación que me genera verte es tan grande, que nunca pensé que lo diría en voz alta-
Era inusual ¿Por qué estaba diciendo esas palabras? ¿Por qué luego de recordar todas esas cosas se sentía más cómodo a pesar de las cosas que habían pasado? Yibo pozo sus manos sobre las de Xiao Zhan, manos grandes y cálidas, eran simplemente perfectas. Las acaricio un momento, viendo como su cuñado cerraba sus ojos, el suave toque de la persona que había esperado por años, era capaz de hacer que se tranquilizara por completo.
La tranquilidad se escuchar sus latidos junto a su oído parecía ser la mejor experiencia que podría existir. Sin perder más tiempo el "Alfa" acerco sus labios hacia los del "Omega" y por primera vez Yibo sintió el éxtasis de estar con una persona cariñosa.
Sus brazos rodearon el cuello de Xiao Zhan, mientras este rápidamente lo sentaba sobre sus piernas, acariciando su suave cabello, envolviéndose en un dulce y largo beso, que no les permitió separarse hasta que el aire les falto a los dos.
El hombre se despojó de su camiseta, dejando a la vista su bronceado torso. El joven permaneció un momento mirándolo, acercando sus manos hasta sentir su piel, sus manos estaban frías pero eso no le importo a Xiao Zhan, solo quería ser tocado. Las fuertes feromonas de su cuñado hicieron que el cuerpo de Yibo comenzara a calentarse y cuando el miembro del "Alfa" roso su trasero, ya no pudo soportarlo más.
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Suave y Delicioso (ZhanYi) (One-Shot)
Фанфик"Déjame... No toques ese lugar... Ya no aguanto más... ¿Por qué el novio de mi hermana me está haciendo esto, si ellos ya están vinculados?" Yibo es un "Omega" alegre y despreocupado que constantemente camufla su esencia para parecer un "Beta", qui...