Capítulo 4

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Miraba la infinidad de estrellas que se apreciaban en el espacio, eran hermosas, asombrosas, atrayentes...No era la primera vez que lo hacía, en los momentos libres de entrenamiento que le había dado el gran Freezer siempre se tomaba el tiempo de mirar los planetas y las estrellas. No sabía por qué, pero cada vez que los miraba sentía cómo si hubiera viajado por esos planetas, como una pirata espacial...Sabía que sonaba estúpido, ella no había viajado a ningún planeta antes, ella había sido creada por Freezer para matar al príncipe mono, así que no era posible. Pero, no sabía porque, pero sentía eso...

Por otro lado, mientras miraba el espacio no pudo evitar en sentirse miserable en su misión. ¿Cómo es posible que ella esté aquí, mirando los planetas cuando en realidad su misión era matar a Vegeta? Freezer la había creado para eso, ella tenía que obedecer a su creador porque le había dado la vida, la había rescatado y la convirtió en un androide, tenía que obedecerlo y matar a ese mono miserable.

¿Pero, qué había hecho? Había fallado.

Maldición, su creador estaría furioso al enterarse de que no había logrado su cometido, ¡ella, quien había sido creada para matarlo! El maldito había utilizado una de sus artimañas y había descompuesto uno de sus sistemas mecánicos. Pero, ¿qué hizo ella? Había aceptado su ayuda para que puedan arreglar su herida mecánica y aquí se encontraba...compartiendo la nave con aquel príncipe mono que ELLA debía matar.

Qué vergüenza.

Sin embargo, no le quedaba de otra, podía sentir perfectamente cómo su sistema se estaba debilitando...o ¿fallando? No lo sabía, pero si sabía que ella estaba mal y si no hacía lo posible para arreglarlo no sabía que podía pasarle.

No obstante, ¡eso no era excusa para no matarlo!

Tenía que seguir las ordenes de su creador, matarlo, eliminarlo de una maldita vez, pero... ¿porque no lo hizo? Lo haría, ella lo mataría, en el momento más inesperado lo haría, aprovecharía que él se duerma para matarlo y arrancarle esa maldita cabeza.

Suspiró profundamente, Freezer la había dado cómo lapso una semana para matarlo, aunque en sí debió matarlo aquel mismo día, aún le quedaba 4 días para matarlo.

El problema es, que desde ese momento que ella y Vegeta se fueron en su nave para ir al planeta comercial a buscar a alguien quien la pudiese arreglar ella estaba teniendo un montón de esas escenas por momentos. Ese chico con cabellos alborotados y la mujer pelinegra, no dejaban de aparecer en su mente...podía verlos hablar con ella, pero no podía escucharlos nada...absolutamente nada. Sentía que tenían que ver algo con ella, que eran cercanos a ella, pero sonaba totalmente absurdo y estúpido...

Sus finas cejas azulados no evitaron fruncirse ante ello, lo más seguro es que fue era un fallo sistemático por el golpe que le había dado Vegeta...sí, era eso.

Retirando su vista del espacio, se enfocó en ver cuánto faltaba para llegar al planeta comercial; 28 horas.

Bien, tenía 28 horas para entrenar su mente y su físico, e intentar buscar la manera para matar a ese mono.

Alejándose un poco de la pantalla, se dispuso a estudiar la sala principal. Sabía que el mono estaba en otra de las habitaciones de la nave y lo más probable es que él esté entrenando, no lo culpaba, dejaría que entrenará, al fin y al cabo, ello misma lo mataría y no serviría de nada ese entrenamiento que estaba teniendo.

La nave era grande y espaciosa, así que si podía entrenar; pero no entrenaría físicamente, no...todavía no era el momento, por ahora entrenaría mentalmente. Necesitaba que su mente deje de agobiarla con imágenes que no eran, y la mejor forma para ello era entrenando a su mente.

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