Menta y Tierra Húmeda [CBG + KTH]

ᴍᴇɴᴛᴀ ʏ ᴛɪᴇʀʀᴀ ʜúᴍᴇᴅᴀ

Menta y Tierra húmeda habían sido los aromas favoritos de Choi BeomGyu, uno de los empresarios más conocidos e importantes en todo Seoul. Dueño de la empresa que él mismo fundó y el alfa más respetado entre muchos. Nada ni nadie podía superarlo, nada ni nadie era capaz de encararlo. Hasta que el omega Menta y Tierra Húmeda apareció.

Ese jovencito que buscaba empleo en la agencia que tanto había admirado desde hace unos pocos años.

El chico Menta y Tierra Húmeda llegó a aquel edificio para ganarse el corazón y cariño de todos, incluyendo a Choi BeomGyu. El omega, por más de ser pequeño, tenía un temperamento bastante fuerte, no dejaba que nadie le pasara por encima. Eso llamó la atención del Alfa con aroma a Pinos y Frutos Silvestres.

Y supo que ese escandaloso chico sería su alma gemela el mismísimo día en que lo conoció.

— La empresa ha estado en busca de nuevos empleados, necesitamos más personas en la zona de marketing. —Hablaba uno de los señores mayores con los que se asociaba Choi. Y se llevaban bastante edad, ya que el único que tenía menos de 30 años ahí era él, BeomGyu.

— Nuevos empleados sería una pérdida de dinero, pero soy consiente de que son necesarios. Y hablando de eso, mandé un anuncio para un nuevo asistente, tuve que despedir a la anterior... —Fue lo que dijo el joven empresario.

Pero todo lo que el señor mayor le había dicho después, se había perdido por las paredes de la oficina. ¿Por qué? Pues porque el buen olfato del Alfa con aroma a Pinos y Frutos Silvestres se había agudizado tanto por lograr persivir un delicioso perfume. Una pequeña fragancia que lo hizo perder los estribos en tan solo segundos.

Necesitaba saber lo que era, necesitaba saber quién era.

— ¿Qué es ese perfume? —Preguntó, interrumpiendo lo que el mayor le decía.

— ¿Disculpe?

— Creí haber dicho que nadie podía venir al trabajo sin usar supresores, el aroma de los demás me sofoca. ¿Contrataron a alguien de imprevisto? —Volvió a cuestionar, esta vez levantándose para caminar fuera de su oficina.

— Señor, no hemos contratado a nadie, pero no entiendo de qué perfume me habla.

BeomGyu ignoró olímpicamente al alfa detrás suyo y se aseguró de que ese aroma no estaba en ese piso. Por lo que corrió hasta el ascensor para poder bajar hasta la planta baja y así saber de dónde provenía el dichoso perfume.

Estando él en el piso más alto del edificio, se sentía ansioso por tener que esperar tanto. Más aún cuando esa deliciosa fragancia se iba intensificando mediante el ascensor descendía.

¿Pasto y Fresas?

Piso 10.

¿Lavanda y Miel?

Piso 5.

¿Rosas y Caramelo?

Y entonces, las puertas del ascensor se abrieron. Dejando que el fuerte olor a Menta y Tierra Húmeda se colara por sus fosas nasales.

Menta y Tierra Húmeda...

— Señorito Kang, entienda que al señor Choi le desagrada sentir el aroma de los demás, en especial si son omegas. Le pido amablemente que, por favor, vuelva otro día. —Escuchó como uno de los guardias de seguridad hablaba.

Por inercia, giró hasta donde la voz se escuchaba, quedando perplejo con la imágen frente a él.

— ¡No, me he tomado tres supresores antes de venir aquí! Por favor, no entiendo por qué mi aroma está así, solo déjeme quedarme... ¡Lo único que quiero es una entrevista de trabajo con el señor Choi! No creo tener otra oportunidad otro día...