Capítulo 9

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Tosí torpemente
-Me iré a dormir um... a la casa de Veronica.
Amargamente mentí, ella levantó las cejas con desconfianza.

-¿Esta tarde?.
Preguntó desconcertada, yo solo asentí.

-Si, solo debo caminar unos cinco minutos de todos modos.

Justo cuando pensé que estaba a punto de protestar, me mostró una suave sonrisa.
-Esta bien, diviértete.

Suspiré aliviada mientras salía de casa tan rápido como pude. Ni siquiera sabía dónde quedaba ese tal Hotel Hilton, pero supongo que era algo muy elegante.

Espero que a Toni no le importe que llegara un poco más temprano. Probablemente, solo iba a esperar un poco hasta que ella regrese de la boda. Pero si no puedo encontrar este hotel, probablemente sea yo la que llegue tarde.

Supongo que la única cosa que podía hacer era llamar un taxi y esperar. Debería haberme ido después, pero mi madre así sospecharía del porque me fui a una piyamada a las once de la noche.

~

"Son 15 libras"

Abrí mis ojos por la cantidad que debía pagar por tan solo diez minutos. ¿Estaba bromeando, verdad? Suspiré mientras le daba el único dinero que tenía y salir del coche. Toni definitivamente me debía dinero por esto. Después de todo, esto era en realidad para su beneficio.

Me acerqué al mostrar de la recepción tímidamente, tratando de recordar lo que Toni me dijo. ¿Yo era su novia o su hija?

-Hey, Toni Topaz me...

-No digas más.
El chico peculiar del mostrador sonrió -Tu eres su hija ¿no?.

Abrí mis ojos un poco ¿Su hija? Si ella no quería joder más esto, entonces no debería haberles dicho que yo era su hija.

-Si, yo soy su... hija.
Fingí una sonrisa, pero me sentía terriblemente mal.

-Uh... ella me dijo que tenía que esperar a una muchacha con su uniforme de la escuela.
Me observó con desconfianza, levantando una ceja mientras me mordía el labio.

-Está aquí.
Rápidamente levanté la bolsa y el dio un suspiro de alivio antes de que me entregara una tarjeta blanca, supongo que era la llave de la habitación -Disfrute su estancia en el Hilton.
Sonrió.

Rodeé mis ojos mientras caminaba hacia el ascensor, mirando la llave de la habitación. Al parecer, me dirigía al piso 18, habitación 32.

Apreté el botón del ascensor, esperando pacientemente ya que probablemente iba a estar sola por un largo tiempo en aquella habitación del hotel. Una vez que llegué al piso, comencé a buscar la habitación 32. Los pasillos se veían muy bonitos y elegantes.

Después de mirar bien, finalmente encontré la habitación. Puse la llave, y solté un suspiro de alivio cuando me concedieron el acceso. Abrí la puerta color blanco perla, teniendo una buena mirada al interior siendo recibida por un corto pasillo. Tímidamente caminaba con algo de temor, mirando la decoración, que se basaba en un tema griego y real. Definitivamente esta era una suite cara.
Entré a la habitación, dejando caer mi mandíbula mientras las sábanas de seda color crema se conectaban en cascada a la cama. Complementado por almohadas de plumas. No creo que haya estado en un lugar tan bonito como este, a excepción de la casa de Toni. Me gustaría saber cuál era su trabajo, pero realmente, no era de mi incumbencia.

Pasé al cuarto de baño de mármol blanco, observando bien el espejo antes de fruncir el ceño. Me veía terrible. Era como si acabara de llegar de una noche de borrachera. Si Toni me veía así, me iba a morir de la vergüenza.

De repente, escuche un portazo. Me quedé helada de miedo, escuchando como alguien entró por la puerta principal"¿Quieres oír las buenas o malas noticias?" Una voz profunda familiar dijo con tono algo emocionada ¿Había alguien más con ella?

-Quiero las malas noticias.
Una voz apagada respondió. Fue entonces cuando me di cuenta de que ella estaba hablando por teléfono.

-Bien, bien... La mala noticia es... No nos ofrecen el acuerdo de veinte millones que esperábamos.

Sentí que mi estómago caía en cada una de sus palabras, permaneciendo todavía paralizada ¿Acababa de decir veinte malditos millones?

"
Z¿Qué? ¿Cómo carajos hay buenas noticias después de algo así?.
Una voz masculina respondió gritando. Supongo que era su colega o algo así.

-Porque nos ofrecen treinta y cinco millones!.
Ella arrogantemente vitoreó. No debería estar escuchando esto en absoluto, ya que no era de mi incumbencia. Pero... mierda, ¿treinta y cinco millones de dólares?

-En este momento, usted está hablando con la nueva directora general de todos los hoteles de la cadena Hilton en Londres.
Ella se burló, y podía imaginar esa sonrisa en su rostro ahora mismo. No era de extrañar que su casa fuera jodidamente enorme, era propietario de hoteles.

-¿Que se siente hablar con Conrad Hilton?.

-Intimidante, pero mierda, se siente bien.

-Hey, talvez esto significa que puedas tomar contacto con la misma París.

Mi corazón casi se cae un poco, pensando en la idea de Toni con la puta de Paris Hilton. Esa imagen que no quería en mi cabeza.

-Ella no es mi tipo.
Toni rió entre dientes y suspiré de alivio. Cualquier pensamiento de ella con otra chica me inquietaba.

-¿No? ¿Por qué?.
La voz respondió con confusión.

-Porque me recuerda ami esposa.

Jadeé cuando accidentalmente dejé escapar una breve carcajada, golpeando mi mano sobre mi boca -¿Qué demonios fue eso?.

-¿Qué?.

-Lo siento.
Toni murmuró.
-Pensé que había oído algo. Escucha, tengo que irme, Volví a la habitación para buscar mi libreta de cheques y ahora no lo en... mierda, ya lo tengo.

Respiré intensamente, aliviada de que Toni estaba a punto de irse. Si se enterara de que estuve escuchando mientras hablaba por teléfono, entonces pensaría que estaba loca. No puedo creer que me haya mentido acerca de ir a una boda cuando en realidad tenía una reunión ¿Fue algo tan confidencial para que no deba saber?

En cuanto arreglé mi cabello y maquillaje, no pude evitar pensar en Toni. Había tantas cosas que yo no sabía de ella, en como ella se volvió millonario o multimillonario, ni lo sabía.

Me puse mi uniforme por segunda vez en el día, revisándome antes de entrar al dormitorio de nuevo. Al fin pude notar porque Toni pensaba que era sexy. Mi falda era bastante ajustada y a través de la camisa, se podía ver fácilmente mi sujetador. Estaba un poco demasiado lista para ella, solo tenía que pasar el tiempo un rato.

Miré la televisión por una hora aproximadamente, estaban pasando Modern Family, así que supongo que no era tan aburrido estar sola. Solo deseaba que ella esté aquí y haga lo que quiera conmigo. Nunca pensé que estaría haciendo algo así con ella, y creo que me alegraba aquello.

Oí la manija de la puerta, haciéndome saltar del sofá y subirme rápidamente a la cama matrimonial. Miré un poco mi uniforme, me gustaría hacer lo que sea necesario para la aprobación de Toni.

Ella se apareció por el pasillo, sonriendo una vez que me vio.
-Te ves tan lista para mí.

Trate de no gemir ante sus palabras seductoras, no pude evitar sonreír yo también.
-Siempre, mami.

Me miró como si le pareciera impresionante, dando un paseo hacia mí con su traje negro ajustado. Me gustaría saber cómo se veía sin el -Claro que lo estás, bebé.

-¿Que tan malo es lo que quieres?.
Ella susurró con una sonrisa, me frustraba que quiera encaminar las cosas tan rápido.

-Muy malo, mami.

-¿Quieres sentir mi lengua de nuevo, bebé?.
Ella dijo, con los ojos llenos de deseo.

Me dolía en estos momentos "Sí"

-Entonces inclínate como la buena chica que eres.  

Call me MommyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora