Castle [Taejin]

Capítulo 12

El salón de cine no tenía ventanas, quizás fue por eso que se quedaron dormidos. Sin embargo, Jimin se despertó de repente, como una alarma natural, y con el sonido de su jadeo al levantarse y ver el reloj, despertó a todos.

Taehyung se espabiló primero que Seokjin, este último aun ni siquiera abría los ojos murmurando '5 minutos más' y tratando de voltearse, por lo que se separó de él de inmediato al notar que prácticamente estaba aplastándolo, pero Seokjin volvió a atraparlo, pegándolo a él como si se tratara de una almohada, apretándolo como si fuera una. Taehyung se sonrojó y se atrevió a plantarle un beso muy corto y pequeño en el cuello. El contacto de sus labios fue mínimo, pero Seokjin abrió los ojos de inmediato, liberando a Taehyung en el medio de su confusión, el joven se rio por lo bajo y se levantó para ayudar a Jimin a organizar, dejando a Seokjin perplejo todavía en su sitio con cosquillas recorriéndole todo el cuerpo empezando desde el lugar del tierno beso.

Jimin tenía que asistir la recepción ese día, y seguramente había alguien muy exasperado cubriendo su tardanza, por lo que salió del salón como una gacela, dejando a los demás encargarse de la habitación. Yoongi también debía bajar a la cocina, pero al haber cubierto a sus colegas en muchas ocasiones, sabía que estos estarían devolviendo el favor felizmente; en cambio, Hoseok si se apresuró, debía estar lo más pronto posible en el pueblo para abrir la tienda de flores, por lo que se fue tan rápido como Jimin una vez recogió sus cosas.

Así que sólo quedaron Jungkook, Namjoon, Taehyung y Yoongi, el primero y el último fueron por bandejas de desayuno para todos, mientras los demás doblaban las sábanas, guardaban el proyector y recogían las cosas sucias, en silencio. Jungkook volvió sin Yoongi, pero con un pequeño desayuno para compartir, y después de comer, se separaron para continuar sus tareas del día. Namjoon y Jungkook se llevaron las cosas para guardarlas; Taehyung debía arreglar unas cosas en la granja antes de partir al pueblo, y Seokjin también debía hacer su maleta y arreglarse, entre otras cosas para su visita al pueblo, además aprovecharía para descansar en la comodidad de una cama antes del viaje en auto.

Seokjin armó un pequeño bolso con las cosas que creía, serían necesarias, productos básicos y suficiente ropa. Antes de salir de su habitación dio un pequeño recorrido con su mirada desde la puerta, tratando de recordar si olvidaba algo, cuando sus ojos se posaron sobre su teléfono olvidado en la mesita de noche. A regañadientes lo tomó en sus manos, animándose cuando este se encendió y le mostró su foto con Taehyung, y eso lo armó de valor para enviar un mensaje a su manager y asistente que pasaría unos días en el pueblo de la costa, y que se encargaran de avisar a todos los que quisieran contactar con él que se encontraba en una excursión con el señor Kim, para después volver a dejarlo sobre la mesa.

Pues no era mentira, iba a una excursión con el señor Kim, sólo que, con el más joven, pero eso era un detalle insignificante para cualquier otra persona que no fuera Seokjin, por lo que no era necesario mencionarlo.

Después del almuerzo, en el que Jimin estuvo ausente porque los de recepción lo regañaron al llegar tarde esa mañana y no lo dejaban salir de esta, obligándolo a comer ahí; Taehyung y Seokjin se despidieron de todos, sin olvidar pasar por la recepción donde el pequeño rubio hacia puchero. Taehyung lo llevó luego, a un inmenso garaje subterráneo donde guardaban los autos, de la familia Kim, de algunos trabajadores e incluso Seokjin reconoció el suyo, ofreciéndose a conducir, pero el castaño se negó.

Taehyung escogió uno de los autos pequeños metiendo las cosas que llevarían consigo, sin olvidar algo para comer y beber en el camino, lo encendió y una vez con los cinturones abrochados, los condujo por un camino de piedras lisas fuera del castillo. Era la primera vez de Seokjin saliendo por la entrada principal del castillo, la que daba con el pueblo, cruzaba y rodeaba varias fuentes antes de hacerte pasar por un anchísimo y altísimo portón antiguo y pesado que se mantenía abierto, evidentemente el diseño era viejo, pero lo habían restaurado y era realmente bonito. Se giró para verlo desde el frente, tenía muchas flores decorando la parte superior y sus barras de metal, a los lados unos árboles cuyas ramas planeaban consumirlo con el tiempo.