Después de varias horas de camino por el bosque, por fin habíamos llegado a la frontera, entre todos cruzamos y tras caminar unos minutos vimos el famoso lago de las sirenas. Admito que era muy hermoso, el agua era cristalina y se veía bastante profundo; todos nos fuimos acercando lentamente y al llegar al lago notamos que no había nadie.
- que raro pensé que las sirenas estarían por aquí- dije algo confusa
- se supone que a estas horas salen a tomar el sol- dijo Zeus buscando con la mirada a alguna de ellas.
- pues no hay nada- suspiré - que decepción creí que podría ver alguna sirena y quizás hasta ser amigas-
Unos segundos después una mano salió del agua y me tomó del tobillo, con una gran rapidez me tiro al suelo y comenzó a arrastrarme hacia el lago, todo fue tan rápido que ninguno de nosotros logro reaccionar a tiempo y de pronto ya estaba en el lago.
- ¡Lucy!-
- ¡Ama Lucy!-
- ¡Zeus, flora ayu...!-
La mano que me había arrastrado al lago ahora me estaba hundiendo al fondo de el, una vez que logré abrir mis ojos note que la dueña de la mano era una sirena, trate de gritar pero al estar dentro del agua, de mi boca solo salían burbujas, comencé a forsejear hasta que por fin me pude liberar. Nade hasta la superficie y por fin salí.
- cof, cof, cof- comenzé a sacar el agua que había tragado
- Lucy estás bien- preguntó mi gigante guardian
- cof, cof, creo que si ¿Por qué no me ayudaron? Pude haber muerto ahí- dije algo cabreada pero a la vez triste
- lo siento, pero los gigantes de piedra no somos buenos nadadores, perdemos fuerza cuando el agua nos toca-
- las hadas y el agua tampoco se llevan muy bien ama Lucy, si mis alas se mojan ya no podré volar-
- agh, esto no es bueno, ninguno de los tres puede nadar, eso nos va a generar un problema-
El agua comenzó a moverse un poco más rápido y comenzaron a asomarse las sirenas, una de ellas se acercó a la orilla y sonrió, su aleta era muy bonita, de un tono azul muy brillante con reflejos morados y su cabello era largo, parecía muy suave. Sin duda una criatura hermosa
- disculpen, no estamos acostumbradas a resibir visitas y estábamos aburridas jajaja
- ¿solo era una broma?-
- claro, no somos peligrosas-
- agh, las ninfas nos lo advirtieron y no las escuchamos- definitivamente ya estaba muy molesta "debí escuchar las advertencias"
- en fin, ¿Puedo preguntar quienes son ustedes?-
- si claro, mi nombre es Lucy, el es Zeus y ella flora, soy... Una Demeter-
Las sirenas se sorprendieron al escuchar lo último pero eso no les impidió chapotear de la felicidad.
- es maravilloso, al fin alguien vino a liberarnos de esa horrible bruja-
- así es, pero, necesito su ayuda para aprender a controlar el agua-
- será un honor para nosotras enseñarle a nuestra salvadora. Lo primero será enseñarte a nadar, por qué veo que no sabes jajaja- "hasta su sonrisa era linda"
- si, por favor💧- " no le veo la gracia, muchas personas no saben nadar"💢
Pasaron las horas y durante ese lapso logré aprender a nadar, al final las sirenas resultaron ser buenas maestras, no era de sorprenderse, ellas vivían ahí después de todo.
- bien, ahora te mostraremos a controlar el agua-
- ok-
- verás que no es muy difícil, solo debes concentrarte bien y combinar tu espíritu con el agua-
La sirena me miró con una ceja arqueada ante mi silencio, y es que mi cara de confusión hizo evidente que no había entendido nada, ella me miró y luego cerró sus ojos para tratar de encontrar una mejor explicación.
- mira te lo pondré más fácil. El agua es como la vida- puso su mano sobre el agua y está comenzó a moverse suavemente
- aveces fluye con tranquilidad y ritmo- agitó más su mano y el agua comenzó a formar pequeñas olas que chocaban unas con otras
- y otras puede convertirse en una tempestad en forma de olas que pueden ahogarte si te desesperas por salir. Ese es el propósito de todo esto, debes controlar tu desesperación y dejar que tú espíritu fluya como el agua de este lago. Para eso es necesario que estés serena y tomes una mentalidad neutra respecto a esto-
Esa fue una explicación detallada y a la vez muy profunda, pero, almenos había comprendido lo que debía hacer. Nade un poco adentrandome al lago, me relaje y dejé que mi cuerpo flotara en el agua.
Fue una sensación muy agradable, el agua tocaba con delicadeza mi piel, mis oídos se inundaban con el relajante sonido que está emitía y de vez en cuando la humedad en mi cabello que se deslizaba por mi fleco, callendo a mi rostro en forma de gotitas, le daban al momento un toque más hermoso, sin duda me sentía en el paraíso. Relaje mis manos dejando que las yemas de mis dedos tocarán delicadamente el agua, como si se fuera a romper con mi tacto, poco a poco comencé a moverlas. Mis oídos zumbaban, mi alma estaba relajada y mi mente no estaba en blanco pero tampoco estaba atascada de pensamientos. Era un equilibrio perfecto. Y entonces sucedió...
El agua comenzó a formar remolinos a mi alrededor y luego se levantaron formando chorros, no tarde mucho en controlarlos a mi voluntad creo que había tomado práctica de las ninfas.Poco a poco despertaban mis poderes y me encantaba, por primera vez en toda mi vida me sentía poderosa, libre y más segura de mi misma, parecía que todas mis inseguridades se habían ido...
O tal vez solo las dejé fluir como el agua en mis manos, no lo sé pero si sé que quería conservar este sentimiento de seguridad siempre, incluso cuando regresará a mi mundo. Si es que lograba hacerlo.
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~EL REINO PERDIDO~
FantasyElla es tímida y no es fuerte, pero si quiere salvar el mundo de su amigo, Lucy deberá aprender a controlar sus poderes para liberarlo de la tiranía de la malvada reina iteris, una vez que llegue a vernulia las cosas ya no serán como antes. Si les g...