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Todo empezó en el momento donde se conocieron, ya habían pasado seis años desde que Nialette Weston había nacido en una ciudad europea. Prima-hermana de Bret Weston, los que se llevaban desde chiquitos como dos hermanos aunque ella tuviera uno; Nate. No era alguien con el que pudiera jugar mucho al ser mayor y tener más responsabilidades, pero eso no quitaba el hecho de que eran hermanos y lo quería.
A lo que íbamos, Bret tiene doce años y vive a unas horas del pueblo de Riverdale, así que normalmente ellos se van a visitar en el poco tiempo que llevaban de mudarse, menos de seis meses pero al ser cercanos, no podían vivir mucho separados.
— ¡Las traes! —tocó el hombro del rubio la pequeña rubia que corría por el bosque que estaba alrededor de la casa de los Weston-Wallis.
— ¡Hey! —se dio la vuelta dándose cuenta de lo que había sucedido en tan sólo unos segundos. La buscó rápidamente con la mirada, notando que seguía corriendo detrás de los pinos. — ¡Allá voy, Nia! —avisó para comenzar a correr detrás de ella.
— ¡No puedes alcanzarme, Bret! —negó aún corriendo por todo el área hasta llegar a querer meterse a la puerta de la casa al estar en el patio, ya que, adentro estaban ocupados en unos negocios. Siguió con su recorrido hasta que chocó con algo, o más bien con alguien. — Upss... —dijo cayendo al suelo al ser chiquita y llevando su mirada hacia arriba notando a un niño castaño de pie, con una mueca de disgusto en su cara.
Se puso de pie lo más veloz que pudo, ventajas de ser pequeña y tener mucha energía.
— Al parecer no paran de llegar dinosaurios a la casa de mi primo, ¿quién eres, niño anciano? —se cruzó de brazos examinando al niño que tenía en frente de ella.
— Peter Parker, ¿y tú pequeña pulga? —sonrió también cruzándose de brazos.
— ¿Pequeña? —bufó indignada. — No soy pequeña, tú eres muy grande, debes ser un dinosaurio. —se excusó para mirar a los alrededores, se giró a verlo de nuevo. — Soy Nia Weston. —se presentó orgullosa de llevar ese apellido.
— ¿Weston? —abrió la boca sorprendido. — Debes ser la prima de Bret, si no me equivoco.
— En efecto. —afirmó el nombrado llegando con ellos, quedándose a lado de su prima. — Peter, ella es mi prima favorita, y Nia, él es uno de mis amigos. Su familia está cerrando un trato con la mía. —informó.
La rubia asintió aún enfocando su mirada en el chico que tenía al frente; castaño de ojos verdes, de piel blanca y con cientos de lunares por la cara y el cuello. ¿Perfecto? Nadie lo era, pero definitivamente era alguien con demasiados puntos a favor.
De una amistad claro.
— ¿Qué clase de tratos están haciendo? —preguntó aún sin dejar de ver al chico.
Por supuesto que él se dio cuenta de esto por lo que también se volteó a verla, quedándose en una competencia de miradas.
— Nada malo, o al menos no tanto. Puros negocios sobre libros y esas cosas que no entiendes, para no tardar tanto... Dar dinero para ganar mucho más. —explicó sin darse cuenta que ninguno de los dos le estaba prestando atención por andarse viendo. — Pero ya dije, no es nada del otro mundo aunque tampoco signifique que esté bien. —se encogió de hombros hasta que vió el cruce de miradas de los otros. — ¿Me escucharon?
Nia salió de su trance, sacudió de la cabeza para ahora verlo a él y asentir nuevamente mientras mantenía apretando los labios.
— Se escucha divertido, pero demasiado aburrido a la vez. ¿Y si jugamos a algo? Creo que Peter querrá divertirse en vez de estar sin hacer nada. —comentó inocente.
— Ya estábamos jugando a algo, ¿lo olvidas? —recordó el rubio para después tocarle el hombro. — Las traes, Nia. No puedes tocarme a mí ya que ahora está él, unos segundos de ventaja. —pidió dándose la vuelta, dispuesto a correr. — Ahora sí, cuando cuentes hasta cinco ya puedes seguirnos de nuevo.
Y justo en ese momento, se fue corriendo para los árboles, ahí se podría esconder. Pero mientras él corría, el castaño se había quedado de pie justo en el porche.
— ¿Qué esperas?, ¿acaso quieres que te las pegue? —alzó una ceja juguetona.
— ¿Una niña de cuatro años? Te estoy haciendo esto fácil, no podrías atraparme ni aunque corriera con los ojos cerrados. —se burló de ella, haciéndola sentir ofendida por lo que lo golpeó levemente del hombro. — ¿Auch?
— Eso es una completa mentira, yo soy demasiado rápida. Y si no es así, es porque mis piernas están chiquitas. —explicó.
Peter se rió un poco.
— Sí, es por eso y ya lo sabía. Es que eres tan chiquita que no es difícil pensar que corres lento. Pero ya que dices ser muy rápida, me iré yendo. —avisó cruzando por su lado caminando normal. — Suerte, pequeña pulga. —deseó con una sonrisa ladina deslizada por sus labios.
Dejándola congelada en su lugar, fue a donde estaba Bret para correr junto a él, pasando toda la tarde jugando entre ellos tres y dando el inicio a una bonita amistad, que se iría convirtiendo en algo más con el tiempo, y pronto esa rubia se enamoraría del castaño, tal como él de ella.
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Otra nueva historia, tal y como dice en la sinopsis, no es una Bughead sino de Peter Parker y Nia, un ship que salió de un rol. Eso no significa que no habrá Bughead ya que está relacionado con Riverdale y me encanta.
Si se preguntan quién es cada uno, también lo puse, pero lo diré de nuevo. Obviamente Nia será "interpretada" Sabrina Carpenter y Peter será Timothée Chalamet ya que ahora me encanta ese ship gracias a la hermosa química tengo con -americanbxauty que es a la que le dedico esta historia. Pero claro, no se compara a la que tiene con -ambubxrry y no estoy diciendo esto sólo para que no me mate.
So... Espero que les guste la historia. En especial a Lei.
¿Fecha de estreno? Cuando lo corazón lo quiera, o sea, cuando llegue a los veinte capítulos escritos, like always.01-Ene-2021
-24-Ene-2021-
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𝐒𝐚𝐯𝐞 𝐘𝐨𝐮𝐫 𝐓𝐞𝐚𝐫𝐬
Fanfiction𝐓𝐑𝐈𝐋𝐎𝐆𝐈́𝐀 "𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐇𝐔𝐑𝐓𝐒". 𝗟𝗶𝗯𝗿𝗼 𝘂𝗻𝗼; 𝕊𝔸𝕍𝔼 𝕐𝕆𝕌ℝ 𝕋𝔼𝔸ℝ𝕊. 𝗮𝗰𝘁𝘂𝗮𝗹𝗶𝘇𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀: 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐥𝐨𝐬 𝐥𝐮𝐧𝐞𝐬. Año 2012, la familia Weston-Wallis se muda cerca del pueblo de Riverdale para el comienz...