Ojala

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Y lo vi ahí, sentado con un cojín descansando sobre el y decidí sentarme ahí, a su lado. La música estaba alta, demasiado para lo q me gustaba pero la verdad no me importaba. Empezamos a hablar y nuestras cabezas estaban cerca, demasiado y te juro q daba la vida por apoyar la cabeza sobre el. Estábamos hablando pero había algo q no me convencía, no sabía el que, pero había algo que como que no. Me quedé callada y el bajo la mano dejándola sobre la mínima distancia que había entre sí pierna y la mía. Me estaba poniendo nerviosa. Le cogí la mano como si no me importase nada, como si no hubiese nada entre nosotros y se la volví a dejar sobre la almohada. Me miro y le mire como hacia siempre, con una sonrisa de imbécil q se me pone cada vez q le miro. Me cogió de la mano y se la quedo ahí, cogida, no me soltó. Te juro que un dolor me recorrió por el cuerpo y un calor empezó a subirme, pero a pesar de todo eso, estaba bien. Tenía lo que quería. Lo único que se me ocurrió fue mirarle y apretar la mano.  Me miro a los ojos y se levanto dejando atrás el cojín. Ya no oía la música. No me soltó de la mano, y tampoco yo pensaba hacerlo la verdad. Llegamos como al pasillo de la casa, no sé que era la verdad, pero la música estaba a un tono normal desde esa distancia, ahora estaba mejor. Me soltó de la mano, no entendía nada y otra vez note esas cosquillas en el estómago, no entiendo porqué. Lo mire a los ojos y tenía la mirada seria, por un momento se me pasaron por la cabeza todas las cosas por las me podía haber llevado ahí, y ninguna era buena, no entendía nada. Le mire a los ojos y me sorprendió mucho, ya no veía tan solo esos ojos verdes, veía algo más, como si me estuviese hablando con la mirada, me estaba puto quedando solo con la mirada. Mi cuerpo se apoyó sobre la pared, tenía claro que todo lo que por un momento se me había pasado por la cabeza q podía pasar entre nosotros se esfumó, se lo llevo el aire. 

Y una chica paso por delante de nosotros, la conocía, supongo que era de la otra clase. Y nos volvimos a quedar solos. Lo tenía delante pero no podía mirarlo, me había dejado muy claro otras veces q no quería nada conmigo. Me llamo, y levante la mirada, le mire a los ojos como no lo había hecho nadie. Ahora si q me dolía la tripa, podía sentir todo. Me volvió a coger de la mano y se acercó poco a poco a mi, le volví a mirar a los ojos como pidiendo permiso por lo que pudiese pasar y me deje llevar. Me besó como no lo había hecho nadie, ya no había música, no había mariposas, no había nadie más, estaba él, solo él. Me cogió las manos y me las puso sobre él, me echo hacia él y note como sus manos me abrazaban la cintura atrayéndome hacia él. Nos quedamos ahí mirándonos, y por fin dejo de importarme lo q el mundo pensara sobre mi, estaba él, no entendía nada, pero estaba. Le mire y perdí la cuenta de las veces q le había mirado deseando q lo q estaba pasando fuese verdad. Le sonreí y ahí m quede como una imbécil, apoyando la cabeza sobre su pecho y abrazada a el, como si todo lo q halla pasado se fuese a esfumar de un momento para otro.

Sueños SoñadoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora