Etapas juntos - RayEmma

II: Primer año de primaria

Muchas gracias a todos los que le están dando una oportunidad a mi fanfic uwu

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6 AÑOS:

Ray ingresaba a la escuela Grace Field, en donde su madre era maestra en la secundaria.

Una vez dentro del salón y que Leslie se retirara después de desearle buena suerte, mientras le daba un abrazo y un beso en la frente; Ray no pudo evitar sentir un pequeño nudo en la garganta y algo de enojo; la idea de dejar el kinder, a Norman y Emma lo frustraba, pero todos esos pensamientos se esfumaron al ver ingresar a su amiga de la antena muy animada mientras era cargada en los hombros de un hombre de cabello rizado y con unas cuantas canas.

La niña al percatarse de que su amigo la observaba sonrió - ¡Raaaay! estamos en la misma clase ¡que felicidad!-

Ray asintió y sonrió con ligereza mientras sentía la penetrante mirada del - al parecer padre- de Emma.

El hombre lo estudió con la mirada, bajó a Emma de sus hombros y le dedicó una cálida sonrisa a su hija - ¿Ese es uno de tus amiguitos de los que tanto me hablabas, antena?- La niña asintió y sonrió.

- Ya veo- Le devolvió la sonrisa y miró al niño -Cuento contigo mini emo, cuida a mi bebita o despídete de tus pequeñas bolas- Ray tragó saliva, Emma se percató de esto y golpeó en el brazo al hombre -!Déjalo en paz! ¡Ahuyentas a todos mis amigos, Yuugo!-

Yuugo abrió los ojos y le dedicó una mirada sorprendida a su hija -¡Ya no me llames por mi nombre, Emma! ¡Tenme respeto, soy tu padre!- La niña le sacó la lengua.

El hombre gruñó, soltó un suspiro, para después apuntar a Ray con el dedo -Cuida a mi antenita y hazla reír, pero asegúrate de tener tus pequeñas manos lejos de ella o te las verás conmigo-

Ray frunció el ceño, si tan solo el viejo supiera que es su hija la que anda repartiendo abrazos a todo el mundo.

-Basta, Yuugo- Abrazó con fuerza al azabache, haciendo que se sonroje levemente mientras desviaba la mirada del mayor -Ray es de mis mejores amigos, ¡y no podrás hacer nada para impedir que lo abrace!-

Ray se sentía incómodo, mientras que el adulto tenía un tic en su ojo, por un momento el niño temió por su vida.

Yuugo se despeinó el cabello con molestia, y soltó un suspiro resignado -Bien, enano. Puedes abrazar a la antena- Dirigió su mirada a su hija y se agachó a su altura - Emma-

La niña soltó a su amigo y miró fijamente a su padre -Diviértete, mamá y yo te estaremos esperando- la pelinaranja asintió feliz y abrazó a su padre -Pórtate bien- besó la frente de su hija y se enderezó.

-Nos vemos papi- Sonrió dulcemente, Yuugo sintió emoción y volvió a abrazar a su hija con fervor -¡AYYY! ¡Estás tan grande, antenita! ¡Papá te quiere mucho!-

Una vez que terminó la despedida, Emma tomó asiento junto a Ray -Oye Ray... ¿Crees que Norman venga a esta escuela también?-

El niño frunció el ceño y alzó los hombros, dando a entender que no sabía.

-Espero que sí, pero ya sabes. Norman dijo que sus papás tenían mucho dinero, probablemente vaya a una escuela privada- Emma lo miró, desilusionada.

La maestra ingresó y con esto dió comienzo su primer día en la primaria.

La hora del recreo llegó y grata fue la sorpresa de ambos al ver a su amigo peliblanco sentado en una banca junto a una niña rubia.

Emma corrió a abrazar a su amigo, seguida de Ray el cual prefirió saludar con la mano solamente, sin ocultar su felicidad que le hacía ver a su amigo ahí.

La niña se presentó por el nombre de Anna, era una niña tierna y linda. Norman les comentó que él se hallaba en la clase "a" junto a Anna, mientras que Emma y Ray pertenecían a la clase "b".

Los niños se quedaron conversando y riendo, pasado unos minutos el timbre sonó y cada uno volvió a su aula.

El tiempo pasaba y con ello el primer año de primaria; los niños aprendieron a sumar y restar, a reconocer animales y colores, un poco a tocar el xilófono y lo más importante, a leer y escribir. En ese período Norman hizo buenas juntas con Anna, al igual que Emma; Ray por su parte se mantenía al margen, no tenía nada en contra de Anna, pero su zona de confort eran Norman y Emma.

Las vacaciones de verano no se hicieron esperar, Ray salió de vacaciones a la costa junto a sus padres y su media hermana -hija del primer novio de Isabella, la cual vivía con este en otra ciudad- disfrutaron del sol y la playa, sumando que por fin Ray aprendió a nadar.

Una vez de vuelta, y faltando sólo unos días para el cumpleaños del azabache. Sus padres se encargaron de hablar con los padres de Emma y Norman, para que estos pudieran acompañar a su hijo y así sorprenderlo.

El 15 de enero llegó y con ello la celebración del cumpleaños número 7 de Ray. Leslie se encargó de distraer a su hijo llevándolo a elegir su regalo, el niño terminó escogiendo un teclado, enorgulleciendo a su padre al mostrar interés por la música.

Una vez de vuelta en casa Ray se percató de la presencia de sus dos mejores amigos, sin ocultar su sorpresa les dedicó una amplia sonrisa a sus padres a modo de agradecimiento, así pasó su cumpleaños junto a sus amados padres y sus mejores amigos.

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Capítulo terminado, gracias por leer.
Como pueden ver la historia será contada desde el punto de vista de mi amado cíclope somnoliento OwO