Peor primera impresión
Charles
Recuerdo una de mis clases con la profesora Jackie donde hablábamos sobre la Ley de Murphy. Lo explicaba con la siguiente frase: "Si algo puede pasar, pasará" o de igual manera "todo lo que puede salir mal, saldrá mal". Lo cual nos lleva a considerar todas las posibilidades de un nuevo acontecimiento. Esto último fue justo lo que no hice; simplemente asumí que me encontraría con aquella persona que ronda mis pensamientos de la manera más normal del mundo, independientemente de lo anormal de la situación. Sacándome de mis pesimistas pensamientos, haciéndole honor a Murphy, James me sacude mientras articula una pregunta.
—¿La conosci?— que si la conozco dice, ¿¡que si la conozco?!
—Es ella. Oh mio Dio, ¡Ella es Destiny!— le digo a punto de perder la cabeza.
—¿Todavía sigues con eso? Creí que esa idea absurda ya se había disipado de esa disparatada cabeza tuya.
—Uno, no es una idea, es en serio y dos, me sorprende que actúes como si fueras más normal que yo después de crear una explosión en pleno salón de clases.
—Bueno, pero por lo menos, mi explosión no fue causa de mi imaginación, todos la vieron.
—No discutiré esto más contigo.— dije en un suspiro cansado. —Ya verás que si es real cuando hablé con Destiny. No será hoy, claro. No quiero que me vea como un moco humano.
Justo cuando di por finalizada nuestra discusión, entró el director por la misma puerta por la cual había salido Destiny.
—Va bene, ragazzi, como les iba diciendo, tendrán que venir el sábado por lo menos 15 minutos a ayudar en la biblioteca.— sentenció luego de sentarse en su arrugada silla.
—¡Pero, tengo planes!— se quejaba James mientras yo salía camino a mi casillero en busca de mi uniforme de repuesto, sabía que era en vano discutir con el director.
Ya con mi nuevo uniforme y una pizca de perfume para ocultar el olor a químicos, me dirijo al comedor antes de que se acabe el almuerzo, me quedan 25 minutos para comer.
Ahí está Destiny, al parecer mi hipótesis era errónea. Creí que alguien que observaba a las personas como una psicópata, no iba a tener un gran círculo de amigos. Jones está rodeada por más de 5 personas, chicos y chicas ¿Cómo es que no la había visto antes? No quiero llamarla ahora porque me verá como el chico, el cual revivió como un fluido extraño. Esperaré hasta mañana, capaz y se le olvide. Disipé esas ideas para sentarme con mis amigos, James incluido, no me di cuenta de que había terminado de discutir con el director.
Mis amigos se fueron mientras yo estaba limpiando mi bandeja, no puede ser, se me hizo muy tarde. —Pienso, para después correr en dirección a mi salón de clases, hasta que choco con una desprevenida Destiny.
—Destiny, ve por donde vas.
—¿Cómo sabes mi nombre?— ¡No puede ser!— ¿Charles?
—Ah... h-hola, Jones— trágame tierra, ahí se fue mi primera impresión.
—¡No me lo creo, eres el chico que estaba en dirección!— afirmó como pudo mientras se reía.
—Puedo explicarlo, no fue mi culpa.
Antes de que pudiéramos seguir hablando me invadió una fuerte punzada en la cabeza, al parecer a ella también, puesto que me agarró fuertemente del brazo, gimiendo de dolor. Esto duró aproximadamente 5 minutos y como pude tome a Destiny por el brazo y nos encamine a la enfermería.
—¡B-Basta!— sorprendentemente, el dolor cesó luego de esa orden vacía sentenciada por Jones.
Nos miramos, algo sorprendidos por la repentina calma.
—Ya no me duele, ¿a ti?
—No. Este es el peor primer día que he tenido, primero los mareos y ahora esto.— Expresó frustrada.
—¿Has tenido mareos?
—Si, cuando salí con el director de su oficina, tuve que pararme a descansar con su ayuda.
—Eso explica por qué él duró tanto en regresar. Yo no tuve mareos, pero si estuve muy distraído, por eso James y yo estábamos llenos de químicos cuando nos viste en la oficina. Yo no soy alguien que se distraiga de esa forma.
—¿Crees que sea porque estamos juntos? Como no habíamos hablado en persona antes...
—No lo pienso, aunque no nos habíamos hablado en persona, por lo menos una o dos veces nos hemos cruzado por los pasillos y que yo recuerde esto no había pasado.
Cuando las almas están conscientes de la otra, los síntomas pueden ser varios. Tendrán que acostumbrarse a convivir sabiendo de la existencia de su unión, si sus organismos rechazan esta relación, uno de los dos morirá de manera inmediata para así liberar la otra alma...
—Oh mio dio...— murmuró una temblorosa Destiny— ¡¿escuchaste eso, cierto?!
—Sí.— estaba en blanco, quería tranquilizarla, pero mi cerebro no reaccionaba ante tal aclaración.— Pero ¿Quién dijo eso? —pregunté mientras aclaraba mi garganta.
—No lo sé, tal vez es algo así como un manual auditivo. Quiero irme a casa.
—Yo también, ve tu primero, yo iré cuando mi corazón se calme un poco. Esto es demasiado, ni siquiera tengo fuerzas para intentar aclararlo.
—Hasta mañana, Carter.
Se fue, viéndose totalmente pálida. Espero y, logre llegar a salvo a su casa.
Después de varios minutos sin mover ni una articulación, conseguí calmarme y encaminarme a casa con la excusa de estar enfermo.
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Lazos Mentales
FantasiAlmas unidas, destinos entrelazados. Habilidad única, consecuencias letales ¿Charles y Destiny hallarán todas las respuestas? ¿Cuáles obstáculos encontrarán? La verdad está oculta detrás de quien menos lo esperan. [EDITANDO] Novela Juvenil Fantasía