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*Llamada*

-Papá. -Jack se encontraba yendo andando hacia el instituto con Gustabo a su lado.

-Hijo, dime ¿Todo bien?

-Verás, ayer en el instituto el director se quedó con Gustabo para decirle una cosa...

-¿El qué? Vamos Jack no me preocupes.

-Le propuso acostarse con él a cambio de qué le aprobara varias asignaturas. -Dijo directo

-C-Cómo

-No negamos la opción de que ya lo haya podido hacer antes, por eso te he llamado, si puedes que algunos de tus agentes se pase por el instituto a la hora del recreo para llevárselo detenido y hacerle algún interrogatorio o mierdas de esas.

-¿Pero Gustabo esta bien?

-Si, si, él está bien, esta aquí conmigo, vamos de camino al instituto.

-Joder... Vale, a la hora del recreo le entretenéis y nos lo llevamos detenido.

-vale, gracias papá.

-Nada, cuidaos y suerte para el examen.

-Hasta luego.

-Adiós. *cuelga*

-ya está, vienen a la hora del recreo, hay que entretenerlo para que no se escabulla.

-yo lo entretendré

-Vale, pero yo también voy a estar por si acaso

-No, cantaría demasiado.

-Está bien, pero si llega a pasar algo antes de que lleguen sal de allí corriendo.

-Vaaaaale, eres un exagerado, no va a pasar nada.

-Joder Gustabín...

.-.-.-.

Gustabo se encontraba una hora antes del patio haciendo el control de geografía, estaba casi sudando, no porque no lo supiera hacer, porque no se concentraba con la mirada de su profesor pegada a él, por suerte, Jack estaba a unos metro de él, al ver cómo se encontraba intentó calmarle.

-Venga Gustabín, si te concentras esta noche te invito a cenar. -Dijo Jack en un susurro que solo el rubio pudo oír, este sonrió e intentó concentrarse.

Pasaron unos 45 minutos, el tiempo de la clase y del examen acabó, Gustabo fue a entregar el examen mirando a sus pies para no mirar a la cara al contrario. Le extendió el examen, el profesor al cogerlo le rozó la mano, cosa que hizo que Gustabo tuviera unas ganas terribles de vomitar, lo soltó rápidamente y se fue a su sitio un poco mareado, mientras los demás alumnos entregaban el examen Jack se acercó a la mesa del rubio al verlo un poco mareado.

-¿Estás bien peque?

-Uno, no me llames peque, dos, no, no lo estoy, el enfermo ese me ha rozado la mano y me han entrado unas ganas horribles de vomitar que me he hasta mareao' y to'

-Tranquilo ¿quieres que te dé agua o algo?

-No, no te preocupes ya me he calmado un poco

-¿Seguro que no quieres que esté contigo?

-Que no Jack, tranquilízate, no me va a pasar nada ¿vale? No te me esteres que te da un infarto que ya estas mayor.

-Capullo -carraspeo-

....

-Ya pueden salir al recreo, todos menos García, tengo que hablar con usted, quédese aquí por favor. -Jack le dedicó una mirada de preocupación a Gustabo, el cual se encontraba suspirando intentando calmarse y retenerse hasta que llegara la policía.

Una nueva oportunidad- IntenaboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora