¿podrías invitarle?

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(no encontré otra imagen)

Ya había pasado casi un mes desde que ambos se juraron batalla, y bien no podía decir que algo hubiera cambiado desde que se fue a estudiar ahí, casi todos se alejaban de ella para no tener que lidiar con sesshomaru o mejor conocido como yako, pero la actitud de sesshomaru hacia ella había cambiado un poco por lo menos, desde ese día.

- perdón por llegar tarde profe - dijo mientras entraba a la clase, con su uniforme un poco desarreglado al igual que su cabello plata y sus ojos cerrados, tenia su mano en su nuca y reía nerviosamente.

- señor taisho ya paso la hora de los exámenes, pase a su asiento y lo dará en la hora libre - contesto recibiendo una protesta por parte del peli plata.

- tks - chasqueo mientras entraba - kikyo - dijo viendo como su hermano y compañera se mataban con la mirada. La joven al escuchar su voz dirigió su vista a él con una sonrisa, sin darse cuenta que él otro frunció el ceño molesto.

- inuyasha ¿en donde estabas? - pregunto mientras avanzaba a él.

- en cualquier lugar menos en este - contesto mientras se dirigía a su asiento.

- esto no se acabo cuatro ojos - lo escucho decir en un susurro.

En los últimos días veía como sesshomaru competía con ella, y sabia que no importa que haga siempre estará en segundo lugar, eso la molestaba de sobre manera, no importa lo que hiciera él hacia lo que fuera para que ella este en segundo lugar.

- *no pienso rendirme* - pensó mientras anotaba todo en su cuaderno, y cuando termino sonó la sirena para salir a descanso, como ya era su costumbre guardo todo y saco su almuerzo para ir a comer en la azotea (como lo había estado asiendo en los últimos días), pero antes de siquiera poder salir una voz interrumpió su camino.

- disculpa - dijo con una voz un poco tímida, la joven se dio la vuelta para tomarse con una adolescente de su misma edad, flequillo algo desigualado, con el cabello largo hasta la cintura y su uniforme del colegio.

- ¿que necesitas? - pregunto un poco confundida, ya que en el tercero puesto había quedado esa chica de ojos marrones - *si no mal recuerdo su nombre es aome* - pensó.

- amm, bueno yo... - movió sus pies tímidamente.

- si no me vas a decir nada mejor me voy - dijo dándose la vuelta para irse pero ella lo detuvo.

- ¡espera!, bueno quería decirte que si... po-podrías invitar a inuyasha a una cita - dijo con un poco de tartamudeo.

- *¿invitarlo?* - pensó viendo la expresión de la chica - *ya veo...* - volteando por completo a ella - estas enamorada de inuyasha - dijo viendo como la cara de aome se ponía como un tomate duro.

- hum - solo atino a asentir.

- por mi no hay problema, pero no se si querrá ir a una cita, sobre todo a una al cual no seré yo quien este en esa cita - contesto, con todo ese mes le había estado tomando cariño a inuyasha, y saber que saldría con una chica lo ponía un poco molesta, ese día inuyasha no asistió a clase ya que le había dicho que estaba enfermo.

- bueno, podrías decirle que es cita doble - dijo.

- ¿cita doble? - pregunto, no conocía a todos a su alrededor, pero tampoco era ciega, la que más tiempo pasaba aome era con un chico llamado koga, sin saber cual era esa otra persona acepto.

Aome le dio las gracias y se retiro de ese lugar para reunirse con sus amigas que las estaban esperando para comer juntas.

- jamas pensé que vendrías - dijo una de coleta alta.

enamorandomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora