Amor fuera de tiempo (Aurek y tú)

Capitulo IX

Regrese a casa aun con una sonrisa plasmada en mi rostro, sacar a pasear a Galileo fue la mejor decisión que tome hoy ya que gracias a eso pude encontrarme con Octavio y aunque no lo admitire en voz alta creo que el me gusta.
Al llegar a casa pude ver que mi tía estaba cocinando

— Hola, gracias por sacar a pasear a Galileo, creo que ya le hacía mucha falta — dijo mi tía mientras limpiaba sus manos

— No es nada, ambos nos la pasamos bien ¿Te ayudo en algo?

— Ya veo que si apenas llego y ya se fue a dormir — dijo mientras observaba a Galileo el cual estaba acostado en su cama — ¿Puedes ayudarme picando las papas?

— Claro, no hay ningún problema

Conversamos sobre como nos había ido esta mañana, al parecer mi tía se encontró con una amiga y por eso se quedó más tiempo hasta que se dio cuenta de que era tarde para hacer la comida, yo por mi parte le conté que Galileo hizo un nuevo amigo en el parque y se la pasó jugando con el gran parte del tiempo, terminamos de hacer la comida justo a tiempo ya que llegaron mi tío y Manuel

— Mmm huele delicioso — Dijo Manuel mientras se lavaba las manos

— Y esperate a que lo pruebes, nos quedó riquísimo ¿A que si TN? —  me giño un ojo

— En efecto — sonreí y comencé a servir los platos para después comenzar a comer

— Chicos no se les olvide que pronto viajaremos y se quedarán a cargo de la casa, no quiero regresar y que la casa esté patas arriba porque hicieron  fiestas o ustedes estén enfermos por no comer bien

— No papá, nos sabremos cuidar bien y por supuesto que entre los dos cocinaremos para comer bien

— Tampoco haremos ninguna fiesta, vayan tranquilos somos personas responsables — sonreí en su dirección

— Confío en ustedes

Terminamos de comer, Manuel y mi tío regresaron al taller por lo que me quedé con mi tía platicando en lo que limpiabamos los trastes y la cocina, al parecer mi tía se propuso a enseñarme a tejer y aunque se veía fácil para alguien torpe como yo es una tarea muy difícil, perdí la cuenta de cuantas veces sin querer enrede el estambre causando risas por parte de mi tía, hacer estas cosas con ella era divertido pues no era alguien que se enojara, al contrario siempre te mostraba el lado bueno a las cosas y eso es algo demasiado bonito a mi parecer. La tarde paso más rápido de lo que creía por lo que después de ver la Tele con mi tía un rato subí a mi habitación, el día estuvo entretenido pero ahora en la soledad de mi cuarto recordé el sueño que había tenido, traté de buscarle sentido pero por más que lo pensaba me topaba con un callejón sin salida ¿Quien era Aurek? Puede que lo haya visto en algún momento en el Colegio al cual iba pero como era muy introvertida puede que no le haya prestado mucha atención y sin embargo logro colarse en mi subconsciente y es por ello que mi mente se crea escenas que nunca sucedieron… bueno hasta ahora era muy extraña la explicación pero no por eso queda descartada. Ya no quería darle más vueltas al asunto por lo que decidí dormir de una vez por todas, puede que mis sueños me revelen más detalles y así poder unir las piezas.
Desperté por un grito, el tiempo si que pasa demasiado rápido o demasiado lento cuando uno duerme, sali de mi cama y baje las escaleras corriendo cuando llegue a la parte inferior vi a mi tía con una mano en el pecho, mi tío con cara de confusión, Manuel nervioso y a dos chicos los cuales no esperaba verlos en la casa y más aparte en pijama lo que significa que pasaron la noche.
Por lo que puedo entender Manuel le dijo a sus padres que ellos eran parientes lejanos que llegaron ya algo tarde y que si no había problema se quedarían en casa unos días, mi tía se tranquilizo y dijo que prepararía el desayuno para que mientras comemos platicaramos del tema

— Manuel ¿Puedes ayudarme a mover el escritorio de mi cuarto?

— Claro — subimos en dirección a mi habitación y una vez en ella cerré la puerta

— ¿Hacia donde lo quieres mover?

— No, Manuel ¿Puedes explicarme que esta pasando? Te juro que te creería que son parientes lejanos ¡Si no fuera que los vi en el programa usando ropa de mi época!

—Shh no grites ¿Recuerdas que te dije sobre los chicos que decían que yo era su nono? Son ellos

— ¿Crees que si sean tus nietos?

— Puede que si, puede que no lo que ahora se es que ellos necesitan donde quedarse y yo que me ayuden a conquistar a Amelia ya que entraran al programa

— Ah o sea que no te importa si te estan engañando con tal de que te ayuden a conquistar a tu amor

— ¿TN tu no harías algo loco por amor? — cuestiono alzando una ceja

— Punto a tu favor, por el momento has como que sigues sin creerlo, tengo miedo de que se den cuenta que vengo del futuro y me quieran regresar yo aún no cumplo con mi misión ahora que tengo la oportunidad

— ¿Qué misión?

— Mane, mi vida antes de que pasara esto era un asco y pensé que si llegaba a tener una oportunidad de viajar al pasado evitaría nacer, obvio creía que era algo imposible hasta ahora

— Pero que dices mujer

— Las cosas somo son, ahora vamos abajo qué ya tardamos mucho "moviendo el escritorio"

Bajamos las escaleras y nos sentamos a desayunar, la comida pasó lo más tranquila que se pudo, mi tía acepto a los chicos creyendo que son sus sobrinos

— TN estudia en el colegio Cristóbal Colón, ella puede ser su guía y miéntras ustedes van a comprar las cosas que necesitan para comenzar con las clases yo hablaré con el director — Dijo mi tío a lo que respondí con una sonrisa, bueno ahora las cosas cambiarían un poco y solo espero que sea para bien.