LIBRO 2: CHAKRA.
Luego de defender con éxito a la Aldea Hanami , el grupo continúa con su misión de restaurar la paz en entre las naciones. Ahora Naruto necesita dominar el jutsu Doton y el Raiton, por lo cual en el camino una nueva aliada se une a...
Naruto pertenece a Kishimoto y Avatar: la leyenda de Aang, pertenece a Konietzko y DiMartino.
ACLARACIONES:
(bla) *bla = notas de autora.
bla, bla= flashback, onomatopeyas o pensamientos.
☯☯☯☯☯☯☯☯☯☯= cambios de escenario.
El equipo de Naruto se encontraba durmiendo, después de ese día que fueron perseguidos se dedicaron exclusivamente a descansar. Y hubieran podido continuar así hasta que cierto rubio los despertó.
—¡Hoy es el día! ¿Pueden creerlo, dattebayo? Después de haber aprendido el agua, y la tierra, al fin aprenderé el chakra del rayo. Y este lugar es perfecto, ¿no lo creeS? ¿Sai?
—.....
—Oh, ¿estabas durmiendo?
—No, solo descansaba los ojos —decía con su falsa sonrisa.
—Ok, ya entendí. Lo siento, de veras.
—Buenos días, Naruto-kun, mi futuro Shinobi Raiton —decía Hinata mientras se acercaba hacia él.
—Buenos días, Hinata sensei.
—Oye, a mí nunca me dijiste Sakura sensei.
—Bueno si tú quieres lo hago.
—Y si gustan vengan a tomar el té ya que todos estamos despiertos.
—Lo siento Sai. Trataremos de no hacer tanto ruido.
—¿Y qué haremos primero? ¿El Puño Suave? ¿Un rayo? ¡Quiero hacer una tormenta eléctrica!
—Primero empezaremos con que logres moverme a través de los Ocho Trigramas con tu palma.
—¡Genial!
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—La clave de esto es la postura, para que así logres lanzar una poderosa ola de chakra contra tu oponente. Usas tu propia energía de chakra para esto. Debes pararte firme y fuerte.
—¡Firme y fuerte! Entendido.
—Bien. Dime dónde hay una roca grande.
—¿Una roca? Aaaah, ¡ahí hay una! A tu derecha.
—De acuerdo. Con este movimiento la moveré. Observa —y diciendo eso Hinata, haciendo esa técnica, lanzó una ola de chakra potente que aventó la roca muy lejos —. Bien Naruto-kun. ¿Estás listo para intentarlo?
—Sí, estoy listo. ¡Aaaaaah! —gritó el rubio al momento de intentar imitar lo que su maestra hizo, pero en vez de ola de chakra, salió una ráfaga de aire, y en vez de mover la roca, se movió él chocando con Kurama.
—Ja, te lo mereces poco hombre —decía Sai mientras se burlaba de su amigo por haberlo despertado de su sueño.
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En otro lugar, se encontraba un peligris corriendo al lado de un pelinegro, ambos disfrutaban de los juegos. Pero el escenario feliz cambió a uno triste donde se veía que el pelinegro quedaba aplastado la mitad de su cuerpo por una roca.
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