𝖓𝖔𝖛𝖚𝖒

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SABRINA SPELLMAN llegó a King's Cross a las nueve y media, pero llevaba horas esperando la llegada de Lilith; anteriormente, ambas pasaron por el retrato, aunque en lugar de visualizar el hermoso castillo del cuadro habían aparecido en la estación...

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SABRINA SPELLMAN llegó a King's Cross a las nueve y media, pero llevaba horas esperando la llegada de Lilith; anteriormente, ambas pasaron por el retrato, aunque en lugar de visualizar el hermoso castillo del cuadro habían aparecido en la estación de trenes.  Ambas no tuvieron alternativa alguna más que utilizar el giratiempo y, cuando era el año indicado, Lilith se teletransportó sin dar otra explicación a Sabrina más que se quedará justo ahí hasta su regreso.

Había un gran número nueve de plástico, sobre un andén, un número diez sobre el otro y, en el medio, ella aguardaba impaciente, con Salem rozando sus piernas. Sabrina había presenciado a varios chicos con un carrito atravesar la pared por arte de magia. Varias veces ella esperó un choque de parte de alguno, pero sólo desaparecían. Sin embargo, ya habían pasado varios minutos desde que observó a alguien atravesar el muro, por lo cual la chica comenzó a preocuparse de que ya era muy tarde para irse, aunque su esperanza volvió cuando visualizó a dos hombre barbudos de expresión adusta, ataviados con trajes oscuros que escoltaban a un chico con lentes redondos, una adolescente con cabello castaño y a una familia (supuso ella por su similitud) de pelirrojos.

—Rápido, rápido, por la barrera —dijo la señora pelirroja—. Convendría que Harry pasara primero, ya que...

Miró de manera inquisitiva a uno de los hombres. Éste asintió levemente y agarró al chico por el brazo para dirigirlo hacia la barrera que separaba el andén nueve del diez.

—Sé caminar, gracias —protestó el castaño, y de un tirón se soltó del hombre. Luego embistió la sólida barrera con su carrito, ignorando a su silencioso acompañante, y un instante después desapareció.

Antes de que los demás también lo hicieran, Sabrina se acercó a la familia para aclarar sus dudas. Sospechaba que por ahí podía llegar a Hogwarts, ya que los otros chicos habían mencionado la escuela.

—Disculpe —dijo ella suavemente hacia la señora pelirroja, pero también llamó la atención del hombre pelirrojo que le acompañaba. Mientras, los adolescentes atravesaban la barrera sin prestarle mucha atención a los adultos que se habían quedado atrás—, ¿están cruzando para ir a Hogwarts?

—Sí, querida —respondió ella amablemente, tan amable que Sabrina le recordó a su tía Hilda—. Atravesando está el tren que te llevará al colegio.

—Pero apresúrate —habló el señor pelirrojo de la misma forma amable que su esposa—, sale en diez minutos.

—¿Te ayudamos a cruzar?

—No, gracias, espero a mi... —hubo una pausa, pues no podía decir que aguardaba el regreso de su regente— a mi tía —finalizó con una sonrisa.

—Muy bien, querida —dijo la señora como despedida y cruzó el muro junto con su esposo.

Minutos después, Lilith apareció entre la gente vestida con una túnica verde esmeralda. Sabrina la miró extrañada por su rara vestimenta, pero Madam Satán sólo le hizo caso omiso y le entregó un boleto de tren. "Plataforma 9 3⁄4" se podía leer en él.

Sabrina Spellman 𖤐 Harry Potter And The Chilling Adventures Of SabrinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora