Planes

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- Pero... entonces, como vamos a hacer para sacar a Nar de la cárcel con más alta seguridad?- preguntó Enzo con lógica irrefutable.

- Entramos, agarramos a Nar, y salimos- definitivamente, el Capitán Shinmon está más allá de la lógica.

Si se preguntan cómo es que descubrieron que la Luna Muerta tiene a Nar encerrada, la respuesta es simple: HACKEO. Lo cierto es que Konro tiene una lista de contactos muy interesantes, y entre ellos hay un hacker (O como sea que se escriba) que accedió a ayudarlos.

Vieron pasar un camión por el camino que lleva hacia la Luna Muerta, y de ésta camión se vio caer una flor de fuego. Esto de la flor de fuego ya casi que se va a convertir en la marca de agua de Nar che...

A lo que vamos, es que las mismas flores calleron de la camioneta por todo el camino, y estas terminaron por llevarlos a la Luna Muerta. Por eso es que ahora estaban, de vuelta, todos en la salita pensando cómo mierda sacar a Nar de la bendita cárcel.

- Primero hay que desconectar el aparato que hace que se anule el fuego, o no?- dijo Yakura

- El problema es que apenas lo descinectemos, absolutamente todos los presos se van a escapar. Una cosa son un par de asesinatos, o estar en contra del gobierno supremo del país, pero otra cosa es desencadenar una fuga en masa de la cárcel más segura de todo el país.- Konro definitivamente tenía mucha razón.

- Entonces necesitamos algo que haga que sólo nosotros tengamos poder de fuego. Como si fuera un anulador del anulador de fuego.- todos miraron a Enzo. Por primera vez tenía una idea útil. La última idea que se le había ocurrido era pedir una cita con Nar y después salir corriendo con ella; así que se podran dar cuenta de su graaan inteligencia.

- Nene Hina- le dijo su gemela lo suficientemente alto como para que todos escucharan.

- Los de la 8 no se habían conseguido un científico loco para hacer cosas raras?

- Sisi, Hika. También tienen a ese loco de los animales mecánicos!!

Todo el resto volvió a mirarse.

- HAY QUE PEDIRLE AYUDA A LOS DE LA 8

- Eh eh, paren un poco manga de locos- los frenó Konro-. Si les pedimos ayuda para entrar en una cárcel sin permiso entonces serían complices...

- No serían cómplices si nadie sabe quienes son...- habló Benimaru.

- Sisi!!! Eso también serviría para nosotros!!! Nos ponemos traje negro y máscaras, así no tienen pruebas de quienes somos!!!- se entusiasmó Yakura.

- Okey...- se rindió el Teniente- Voy a llamar a la octava.

Veinte minutos después, casi todo el escuadrón estaba en Asakusa. Estaban todos apretujados en la salita; Konro como intermediario de la 7, y Benimaru sentado en el rincón más alejado que pudo encontrar.

- Se acuerdan de Nar?

- Si- respondieron todos, pero Shinra y Tamaki lo hicieron con más entusiasmo.

- Etto... bueno... a ver...- intentó seguir el Teniente. Yakura lo empujó a un costado y se sentó al frente.

- La Luna Muerta la secuestró porque sus padres eran parte de una secta a un Dios que no era el del sol, y como ella tenía un poder increíble se excusaron con que podría ser "peligrosa", y se la llevaron sin su consentimiento. Pero en verdad lo que pasa es que en la cárcel experimentan con los presos.- les soltó así de una la castaña, sin siquiera una anestesia.

- Estas diciendo que secuestraron a Nar para hacer experimentos...?- dijo el Teniente Hinawa al tiempo que se acomodada los lentes.

- Emmm... si, es básicamente eso.

El Fuego Rojo de Asakusa | Fire ForceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora