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➪ ¿Y Yo Que Hago Con Esto? (NoMin + Idols)

Y ahí estaba Lee JeNo, muriéndose de la tremenda resaca que tenía gracias al fiestón que se había armado junto con sus roomies. Se levantó de la cama tropezando con algo o más bien con alguien, con su mejor amigo casi novio JaeMin para ser exactos pues el chico estaba dormido en el suelo, probablemente había caído de la cama durante la noche o se durmió ahí mismo... JeNo apostaba por la segunda.

El rubio tuvo que levantarse pues alguien estaba tocando a la puerta del departamento, lo había escuchado hace unos minutos pero creía que alguno de los otros chicos atendería, cosa que obviamente no sucedió así que por eso estaba tambaleándose con sueño hasta la puerta, abriendola y encontrándose con una chica bastante conocida para él.

–¿HeeJin? –Preguntó el chico y la mencionada volteó (pues estaba de espaldas) dejando ver que traía un pequeño bebé en brazos, dejando atónito a JeNo. –¿Que haces aquí? –No sé le ocurrió otra cosa que preguntar a pesar de que tenía mil y un preguntas pasando por su cabeza

–Sé que quedamos en no volver a vernos y tal vez no terminamos de la mejor manera pero... –HeeJin suspiró y volteó a ver al bebé. –Es tu hija. –Soltó sin más, viendo al chico abrir demasiado los ojos de la sorpresa.

HeeJin y JeNo habían estado saliendo cerca de 2 años en el pasado cuando ambos estaban terminando la preparatoria, a ojos de todos era la relación perfecta y el primer año fue así, pero en el segundo año las peleas entre ellos se comenzaron a hacer cotidianas, si hablaban solo era para decirse hasta de lo que se iban a morir y ambos terminaron con la relación en medio de una acalorada pelea, diciendo que jamás se volverían a ver por el bien de ambos (a pesar que se lo dijeran sin tanta amabilidad y con una que otra palabrota por delante).

Con lo que no contaban era con que, en su último frutifantástico, HeeJin quedara embarazada, enterándose poco después de haber terminado con JeNo más no podía decirle gracias a su maldita promesa de jamás volver a verse, incluso pensó en interrumpir su embarazo para no tener que darle explicaciones a nadie y llevar una vida lo más normal posible pero no tuvo el valor para hacerlo (además de que tenía un corazón de pollo y en la primer ecografia cayó enamorada del puntito que era su bebé en ese momento) así dando a luz a su pequeña una semana antes de lo relatado aquí.

Volviendo al presente, JeNo en su mente calculaba cuándo había nacido la niña para así poder verificar (al menos parcialmente) que en verdad fuera suya, según su lógica, la bebé era recién nacida o mínimo no pasaba el mes de edad y la última vez que llevó a la cama a HeeJin... Ni siquiera lo recordaba del todo, así que la neurona que había sobrevivido la fiesta de el día anterior mandó al carajo sus matemáticas mentales y de paso también mandó al carajo su sentido común.

–¿Segura que es mía? –Dijo JeNo, viendo a HeeJin rodar los ojos.

–Claro que es tuya, no he estado con nadie más en este tiempo. –Contestó ella pasándole la niña a JeNo junto con el bolso de las cosas para ella. –Necesito que la cuides un tiempo, debo ir a ver a mis papás y ellos no saben de la bebé, porfavor hazme ese favor y juro que en tu vida me vuelves a ver. –

–¿No se lo pudiste pedir a alguna de tus amigas? –Habló el chico mientras averiguaba cómo sostener a la bebé correctamente.

–Ninguna puede, ahora porfavor cuidala, dejé todo lo que necesitarás para la comida y todo eso en la maleta ¡Regreso por ella, lo juro! –No le dio tiempo al rubio de decir nada cuando la chica salió corriendo por el pasillo del edificio.

–¡Espera! ¡HeeJin! ¡HeeJin! ¡¿Y yo que voy a hacer con ella?! –JeNo sentía que le había gritado al aire pues la chica hizo caso omiso, dejando a JeNo en el pasillo más que confundido y con una bebé en brazos.