03. La timida chica de ojos caledóscopicos

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La chica que había gritado que quería que ese fuera su turno se dirigio hacia el centro del sitio, ya que el grupo en ese día se había sentado en la gradas, a un lado de los chicos del presente, ya que sería más comodo que estar de pie durante horas. 

- Hola gente hermosa del pasado. - la chica contaba con el cabello marrón claro con las puntas rubias y ojos caledóscopicos únicos como cierta persona hija de Afrodita. 

- Apostemos a que esa chica es tu hija. - le dijo Annabeth a Piper. - creo que esa es una apuesta que sabemos la respuesta segura - le contesto esta con una risa leve, era un tonteria apostar.

La chica de enfrente al ver que estaban hablando mientras que ella lo intentaba se calló, siempre tenía el pensamiento de que cuando hablaban meintras ella, estaban criticandolao alguna cosa. Al ser algo tímida, el autoestima no era algo que estuviera demasiado elevada. Hasta cabe decir que cuando le grito a Luke, después se puso roja de la vergüenza y se quiso esconder en algún sitio. Annabeth al notar esto se disculpo e hizo un gusto para decirle que podía seguir. 

- Gracias - asintió con una pequeña sonrisa, por lo menos la amiga de su madre había sido buena pidiendo perdon por ello, así se sentía algo mejor. - Lo siento por esa pausa, no me gusta que hablen cuando lo hago yo - "¿Quien lo aguanta?" pensarón todos. - Bien, mejor acabemos con esto rápido, quiero acabar con esto rápido. - lo siguiente lo dijo lo más rápido posible y lo mejor entendible que pudo, no pensaba repetirlo. - Me llamo Astrid Olivia Grace. 

- ¡Lo sabía! - gritaron a la vez Jason y sorpresivamente, Percy. Los dos se miraron a los ojos y se empezaron a reir.

- Tengo 17 años, aunque soy unos meses menor que Luke - le volvieron a interrumpir.

- Por eso te protejo de todos los demás - dijo orgulloso de si Luke.

- Si, ahora porfavor dejame seguir - casi imploro Astrid. - Mis padres son Jason y Piper Grace, Mclean de soltera. De mi parte, en realidad no me decido a ir a ninguna cabaña permanentemente así que voy de una a otra. - suspiro, no le gustaba nada estar ahí delante pero pensó que sería mejor presentarse ahora que después. - No creo que sea demasiado guapa para la de cabaña de Afrodita o lo suficiente poderosa para la de Zeus/Jupiter. Y antes de que digan que no me subestime, no lo intenteis, no vais a hacer cambiar de parecer. 

- Creernos, lo hemos intentando, muchas veces - dijeron los chicos del futuro

- Y, tengo los poderes de embrujahabla y soy conductora de rayos, pero no los puedo producir. - después de fue corriendo a las gradas sin dejar que nadie le preguntara nada, sin embargo Luke salió al centro. 

- Por cierto, que yo no lo dije ayer, yo solo herede la inteligencia de Atenea, no tengo ningún poder por parte de Poseidon. Y que mi nombre es en honor a Luke Castellan y a Ethan Nakamura- luego de eso se volvio a sentar donde estaba antes. 

- ¿Como que pusimos esos nombre? - preguntó Percy a Annabeth, entendía el de Luke pero el de Ethan no.

- Bueno, Luke fue como una familia para mi y supongo que Ethan fue por que al final del todo, fue un heroe a su manera. - no estaba segura de esa respuesta pero le parecía de lo más acertada.

Ahora tenían que seguir, iban a gritar quien quería ir el siguiente pero una chica de pelo rubio se adelantó. Esta iba a pronunciar palabra hasta que ocurrió un terremoto. Todos se empezarón a alarmar y a avisar para que todos se pudieran a salvo pero este paro de repente y cuando todos pudieron fijar la vista, pudieron ver que allí estaban los dioses. Nadie les preguntó nada, más que nada por miedo, pero los dioses no tenían ese temor.

- ¿Quienes se han presentado hasta ahora? - preguntó Hestia, era la divinidad más amable de todas y eso hacía que contestarle no fuera del todo díficil. Entonces Luke y Astrid se levantaran. 

- Yo me llamo Luke y soy descendiente de Atenea y Poseidon - los dioses mencionados se miraron y se hicieron cara de asco pero no dijeron nada. - Y yo me llamo Astrid y soy descendiente de Jupiter y Afrodita. - se escuchó un grito agudo.

- Ay si, tengo una nieta muy hermosa. - la diosa se apareció al lado de la chica y la abrazó, Astrid se encontraba muy incomoda en esa posición, pero no se podía librar de ninguna manera. 

- Eh....mama, creo que estas ahogando a mi hija - dijo Piper, intentando salvar del apuro a su hija.

- Ups, perdón - dijo Afrodita como sino se hubiera dado cuenta y volvió al sitio que estaba antes. 

- Bueno gente. - asusto la chica rubia de antes que se iba a presentar a casi todos porque no se esperaban a nadie. - Es mi turno, mi nombre es...

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Audrey Ochoa as Astrid Olivia Grace

RAMÉ | TIME TRAVELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora