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Tocar melodias cortas con Do había sido la mejor parte de mi día.

Pareciera ridículo decir que dormí con sus melodias sonando en mi cabeza de una manera repetitiva; pero así fue. Me fui a la cama con sus sonoras notas danzando en mis oídos, como si las viviera una y otra vez.

Sonreí recordando las veces que corrigió mis notas.

"Volviste a confundir notas mayores con menores" "separa más tus dedos, de está manera."

Pasamos varias horas en el piano hasta que mi madre nos saco para partir el pastel. Do en ningún momento se apartó de mi lado.

Su mano tibia sujetando la mía por debajo de la mesa me daba emoción y la tierna sonrisa que me dedicaba hacia latir mi corazón de manera rítmica.

Me gustaba



..... 🍁✨...





Me desperté con los primeros rayos del sol que atravesaron las cortinas de mi habitación. Por alguna razón me desperté con un pequeño malestar en mi pecho como si algo me tuviera nervioso e incómodo.

- ¿No llegará? - Mi madre me miraba desde la puerta de mi habitación con su mirada lastimera.

- Su madre dijo que el señor Lim está molesto con ambos por haber venido aún cuando él se los había prohibido. - Frunció sus labios en manera de preocupación.

- ¿Do está en problemas con su papá? - Me asustaba que por mi culpa estuviera en problemas con su padre.

- No creo. Su padre solo estará molesto unos días y lo dejara salir de nuevo al Lago cuando su coraje baje. - Caminó hacia mí y se sentó aún lado.

- Supongo. - Respondí con un puchero y mi ánimo decaído.

- Vamos bebé, no te pongas triste. -Me envolvió con sus brazos y soltó su feromonas para relajarme. - ¿Quieres que te acompañe al Lago para alimentar a los patos?

- No.. yo iré rápido y volveré, no tiene caso quedarme gran rato. -Sonreí aún en sus brazos y oliendo su aroma dulce en su cuello.

- Está bien, llamaré a tu padre para que traiga helado y veamos una película juntos cuando llegue. ¿De acuerdo? - Preguntó besando mi mejilla y desordenando mis cabellos.

- ¡Heyyy! Mi cabello... - La risa de mi madre inundo la habitación y apretó mis mejillas de forma cariñosa destruyendo mi puchero.

Otra de las partes favorita de mi vida aparte de tener a Do, eran mis padres, mis protectores .



......🍁✨.....



3 días habían pasado de la última vez que vi a Do y los días parecían haber duplicado en horas y las horas eran tan agotadoras a cada minuto que pasaban. Por las noches me costaba conseguir el sueño y el malestar en mi pecho era algo que empezaba a preocuparme.

Fui al Claro estos días para alimentar a los patos, no me quedaba más tiempo pues como le había dicho a mi madre, no tenía caso estar en un lugar que me recordaba que Do no podía estar, se me hacía una traición disfrutar del lugar cuando él estaba encerrado quizá pasándola mal.


¿Estarás bien? ¿Tu padre aun está molesto?

Vuelve pronto, te extraño.



Estaba sobre mi cama recostado mirando el techo de mi habitación contando una y otra vez las estrellitas que mi padre había puesto hace unos años atrás alrededor de las lámparas de esas que brillan en la oscuridad, como forma de iluminar un poco mi habitación durante la noche, donde solía darme miedo.

Dejame Amarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora