La vida sigue pasando.
Mi vida sigue pasando.
Han cambiado tantas cosas, posiblemente se ha reducido el dolor, pero la necesidad de un abrazo sigue ahí.
La soledad interior sigue ahí y aún no vivo, no la vida que yo quiero.
Sé que no es querer, que las cosas pasan solas, pero necesito un pequeño impulso más del que estoy teniendo para que la situación mejore del todo.
Pero ahora soy libre, soy libre joder.
No necesito de la necesidad para seguir hacia delante, yo misma arraso con todo.
Deseo tanto, tanto, que llegue el día de abrazar a las personas que me han marcado, esa felicidad es la que me falta.
Saber que todo este tiempo no ha sido aire que llevaba palabras sueltas.
Pese a todo, pese a cada hoja escrita, sigo conservando las ganas de vivir desde el primer día, así el dolor desaparece por momentos y soy una nube que se deja llevar donde el viento arrastre.
Respiremos profundamente y levantémonos, porque la vida es larga y la tristeza engañosa, aprovechemos cada oportunidad al máximo y seamos nosotros mismos, porque este es el comienzo.