28. Criar a Jin Ling

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Jiang Cheng estaba aterrado. Era más de medianoche y el bosque estaba completamente oscuro, solo un poco iluminado por la lámpara que llevaba en sus manos. Gritaba desesperado el nombre su sobrino, quien horas antes había salido a jugar y no había regresado a casa.

Había olvidado incluso que recibiría al hermano del líder Nie, Nie Huaisang, de visita. Solo le importaba encontrar a A-Ling. Sus túnicas estaban llenas de hojas y ramas, su cabello estaba un poco desordenado, allí donde había buscado entre los arbustos.

Entonces escuchó un par de murmullos, una voz suave estaba... ¿cantando? Con esperanzas de que la persona dueña de la voz supiera algo de su sobrino siguió la voz. La voz se hacía más clara y más conocida... ya había escuchado antes esa melodía. Y después les vio. Jin Ling estaba en el hombro de Nie Huaisang, ambos estaban empapados y llenos de lodo. Estaban saliendo de uno de los estanques.

- A-Ling, A-Sang, ¿qué ocurrió? – se sentía tan aliviado que olvidó a los discípulos que iban detrás de él, y de que probablemente hubiesen escuchado el apodo - ¿Por qué están así? –

- Ah... no te preocupes, me encontré a Jin Ling atascado en la orilla. Cuando le quise ayudar también me atasqué – soltó una risa con nerviosismo, además de un ligero rubor que adornaba sus mejillas – Entonces se hizo de noche, y mis discípulos estaban un poco lejos para escucharme –

- Al menos están bien – Jiang Cheng se acercó a su sobrino, dispuesto a cargarlo para que Huaisang pudiera caminar cómodamente, pero el niño negó con la cabeza mientras se aferraba con fuerza a Nie Huaisang – No seas necio, A-Ling... -

- No te preocupes, yo lo llevo –

Con un suspiro, Jiang Cheng se quitó su túnica exterior y cubrió al Nie.

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Jin Ling había estado tan cansado y algo asustado que no quiso despegarse de Huaisang. Éste lo había bañado y lo había ayudado a cambiarse, también se había negado a comer hasta que el Nie le dijo que si no lo hacía no sería tan fuerte como ellos.

Y Jiang Cheng solo se quedó viendo, y pensó con ternura. Nie Huaisang cargando a un bebé, cantándole para que durmiera y enseñándole a pintar. Él le enseñaría a pelear con espada y arco y luego con Zidian. Un bebé suyo y de Huaisang.

El Nie estaba recostado a un lado de Jin Ling, acariciando con suavidad su espalda y cantando despacio y lento. No se dio cuenta de que estaba sonriendo, hasta que Huaisang se levantó y caminó hacia él.

- Eres tan atractivo cuando sonríes A-Cheng –

- Ve a dormir a tu habitación, tus hombres ya están descansando –

Y Nie Huaisang soltó un suspiro enamorado cuando Jiang Cheng tomó su mano y besó el dorso, para después guiarlo a su habitación.

ChengSang/SangCheng Month!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora