Capítulo 17°

567 82 11
                                    

-Skara... ¡Skara!-Boscha la sacudió por el hombro.

Por fin la pequeña chica dejó de mirar al vacío, últimamente actuaba muy extraña.

-¿S...si?-balbuceó un poco nerviosa por todas las miradas de las chicas en ella.

Estaban frente al casillero de la pequeña, esperando que la chica de piel oscura recogiera sus cosas. Amity había notado la extraña actitud de Skara y las dos chicas habían intentado llamar la atención de la más bajita.

-¿Estás bien?-Amity alzó una ceja.

Skara se sonrojó un poco mientras sacudía una mano, para restarle importancia.

-Yo, estoy bien, muy bien-después observó a los lados sonriendo nerviosa. Amity y Boscha se miraron, no podía ser ¿Verdad?
-¡Listo, vamos a clases, Skara!- Dijo una chica de pelo verde llevándose a Skara cerró el casillero de la más bajita antes de tomarla y salir corriendo hacia la clase -. ¡Las veo después, chicas!

Las otras  dos se despidieron, Skara se había comportado muy extraño. Estuvieron unos segundos en silencio, meditándolo.

-¿Crees que?

-Espero que no-Boscha negó con la cabeza aun mirando por donde se habían ido su amiga-. Esto es complicado.

Amity estuvo de acuerdo, después miró la hora y se alarmó.

-¡Hay que ir a clase de arte! Voy a buscar mis cosas, te veo en el salón-se despidió de la peli rosa saliendo en dirección a su casillero.

La peli rosa pensó que era mejor ir de una vez al salón de arte. Fue una de las primeras en llegar, habían unos tres chicos que no conocía (no eran tan relevantes) y Willow y el enano. ¿Tengo tan mala suerte? Al parecer así era, pero secretamente estaba ansiosa por ver a la azabache. Las dos se miraron, pero como siempre, Willow apartó la cara y Boscha terminó frustrada. Fue hasta su lugar, uno de los caballetes del fondo al lado del de Amity. Solo esperaba que hoy su amiga no quisiera hacer otro dibujo del kínder, si no ella volvería a estallar en risas y tal vez esta vez si la suspendieran.

-¡Patterson!-llamó el profesor, todos voltearon a ver a Boscha.
La latina se quedó quieta antes de voltear atrás y después volver al frente y señalarse.

-¿Yo?-sonrío inocentemente.

El profesor rodó y le hizo señas impacientes para que se apurara. Boscha vio que todos la veían, excepto una muy supuesta distraída Willow que prefería mezclar la pintura en su paleta antes que verla. Claro, Willow Park se hacía del rogar, entonces Verónica no caería en su sucio truco.

-¿Diga?-preguntó nada más llegar frente al escritorio.
El señor acomodó sus lentes sobre el puente de la nariz, mirándola. Después alzó una bolsa de plástico, entregándola a la chica de ojos grises.

-Los rollos nuevos, para la cámara-le recordó ya que la peli rosa había pedido el favor de comprar unos nuevos.

Boscha tomó la bolsa de plástico.

-Gracias, jefe-sonrío pero se detuvo de volver a su puesto cuando el profesor la llamó -¿Qué?

-¿Cómo vas con todo el asunto de la fotografía?

-¿Bien?-la peli rosa río un poco pero al ver el rostro serio del señor se detuvo.

-¿Ya has encontrado a tu inspiración?-levantó una ceja, Boscha no parecía entender -. Ya sabes, tu musa.
-Ahh, eso-sacudió la cabeza antes de encogerse de hombros -. No, aun no. El profesor la observó, entrecerrando los ojos.

-Bueno, pues búsquela, cuando la encuentre podrá encontrar su inspiración-después volvió a unos papeles en su escritorio -. Ya puede retirarse, Patterson.

Rivales •Boschlow•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora