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Todavía recuerdo exactamente la última vez que vi a Joel. Pasamos la mayor parte de la mañana besándonos locamente dentro de mi coche. Nunca he probado unos labios tan dulces. Joel estaba pasando por un problema delicado. Creo que la gente de hoy ni siquiera recuerda.

Mucho ha cambiado en estos cinco años, Me gradué de la universidad, hoy trabajo en una de las empresas más importantes del mercado, como diseño de interiores, Siempre me gustó eso. Hoy es lo que más amo.

- Chris, siento molestarte. - Allan mi asistente entró en la habitación.

- ¡Puedes hablar!- Lo miré.

- Es que ha aparecido un cliente exigente y quiere el encuentro contigo.  - habló Allan

-  Estoy ocupado, Allan, ahora no tengo tiempo. - El me miró. 

-   Chris, insistió. Llamó a la empresa y pidió lo mejor, ¡así que eres tú!- Resoplé con rabia.

- Así que esperará, porque no puedo decepcionar a este cliente también. En la última hora de la tarde le contesto.

- Está bien,  llamaré y te lo haré saber. - Alan se fue y yo volví a mi trabajo.

Pasé el resto de la tarde trabajando, necesitaba mostrárselo al cliente mañana,Tan pronto como terminé, Allan entró en la habitación.

- Siento hacerte quedarte, Allan, pero he terminado.¡Tienes la dirección del cliente!

- ¡Si! ¡Está aquí!- me dio el papel.- Ya te advertí que llegarás tarde.

- Espero que lo entienda. Me voy, nos vemos mañana.Buenas noches

- ¡Buenas noches!- Habló y yo salí hacia el ascensor.

Cogí mi coche y miré la dirección, la puse en el GPS, Estaba tan cansado. Conduje hasta que escuché mi teléfono celular. Miré y sonreí.

- ¿Hola princesa?

- Hola mi amor, ¿vienes a casa?

- Cariño, tengo un cliente ahora, volveré un poco más tarde.

- ¡Ah, todo bien!Te esperaré.

- ¿Ya llegaste a casa?

- ¡Estoy llegando!

- No costará mucho.

- ¡Okay te amo!

- Yo también te amo. ¡Adiós!- se despidió y colgó la llamada.

Meg ha sido mi prometida durante año y medio,ella es una mujer maravillosa, tiene su propio negocio y decidida en todo lo que hace. Recuerdo que cuando nos conocimos me llamó la atención su sencillez. Además de hermoso, es una persona increíble.
Vi que el GPS informaba que estaba cerca. Pero unos minutos y me detuve frente a nada menos que la casa de Joel Pimentel.

- ¿Todavía viven allí?Hace tanto tiempo que no sé nada de él.

Salí del coche y fui a la puerta donde toqué el timbre. Pronto respondió un hombre.

- Buenas noches, puedes entrar.Llamaré al jefe.- Habló y entré.

La casa era enorme, un poco anticuada,pero todavía tenía su encanto. Unos pocos colores aquí y todo se vería impresionante. Estaba mirando todo.

- Buenas noches. - Escuché esa voz y me di la vuelta.

Joel y yo nos miramos, después de tantos años. Él está aquí.

- ¿Estás seguro de que es la persona que estoy esperando? - le preguntó al anciano.

- ¡Sí señor!- habló el anciano e hizo un gesto para que se fuera.

Amor y OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora