Capitulo Narrado "Plan A"

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(antes de leer esto, lean la nota que edité ahora del capitulo anterior para que entiendan)

3:55 pm

La hora que marcaba el reloj cuando Nicole sintió el motor de un auto a las afueras del lugar. Levantó su vista y efectivamente, su amiga Gabriela se estaba bajando del auto mientras se acomodaba la ropa y empezaba a caminar a la puerta de la heladería.

Abrió la puerta y Nicole apenas al verla se puso de pie y corrió a sus brazos, necesitaba un abrazo.

—Gracias por venir. —dijo en un tono apenas audible, pero Gabriela al estar a su lado si la logró escuchar.

Te dije que siempre estaría para usted.

El abrazo siguió por unos segundos más y se separaron, sentándose en la misma mesa que hace varios minutos se encontraban Dante y ella.
En tan solo minutos todo cambió, como es la vida, siempre llena de sorpresas.

—Gabriela no quiero sonar tan apresurada, pero ¿cómo se supone que me vas a poder ayudar? —habló tratando de sonar tranquila apenas se habían sentado.

—A ver vayamos un poco más lento ¿de acuerdo?

Nicole asintió.

De acuerdo ¡señorita! —exclamó mientras chasqueaba sus dedos llamando la atención de la misma chica de los helados, quien se acercó rápidamente.

Gabriela, buenas tardes ¿qué se le ofrece?

—Me trae un jugo de naranja, por favor y que sea rápido. —ordenó de manera despreocupada.

La chica la volteo a ver, aunque no de sorpresa ya que ella sabía que Gabriela era así, en sus tiempos libres claro.

De acuerdo, ya vuelvo. —escribió el pedido corto en la agenda y se retiró.

Eh, me va a decir q-

—Shh

Nicole la miró confundida ¿la había mandado a callar?

¿Perdone?

—Hasta que no tenga mi jugo de naranja no diré nada, así que callese unos momentos.

Ella es así aparte me va a ayudar, ella es así aparte me va a ayudar, ella es así aparte me va a ayudar. Se repetía en su cabeza, dándose razones para no levantarle la voz.

La espera no fue larga claramente, llegó la chica con el jugo de naranja y se lo entregó.

Gracias, ya se puede retirar. —pidió con el mismo tono de antes, de ordenar o mejor dicho de jefa, la persona que da órdenes y tienes que hacerle caso si no quieres un golpe en tu cara.

Ya lo sé, que lo disfrute —respondió la chica, para luego marcharse de la mesa.

Que tarde más rara, pensó la misma chica.

Nicole le iba a hablar pero Gabriela hizo una seña que se mantuviera en silencio mientras tomaba el jugo, estaba impaciente así que la miraba cada dos por tres para ver si ya había acabado el líquido.

Cuando finalmente lo hizo, habló super rápido.

Ya me dirás que planeas.

—¿Qué?

—¿Cómo que qué? —se estaba asustando ¿se arrepintió?

Qué que dijiste, hablaste tan rápido que no te entendí nada niña.

El Diario De Un EsquizofrénicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora