Narrado Parte 4

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Está realmente complicada la situación en la que se encuentran nuestros protagonistas.

Habían logrado hacer el plan.

Pero quien dijo que por haber escapado las cosas serían fáciles?

Porque ahora literalmente se encontraban en la calle y no sabían dónde ir.

Dante no contaba con sus amigos de su infancia, con su familia mucho menos.

Solamente estaban la voz y él. Solamente su cabeza y él.

"Deberíamos irnos"

La voz interrumpió sus pensamientos.

Pero recién se había dado cuenta de algo, su diario. El diario donde se desahogaba diariamente lo había dejado en la habitación.

"Ey, qué te pasa?"

-Dejé mi diario en la habitación -le respondió nervioso y desanimado.

Dante se imaginaba antes de escapar que cuando lograra tocar el pavimento de la calle sería el hombre más feliz del mundo. Pero ahora que eso estaba pasando, no lo era.

No estaba ni cerca de ser feliz.

¿Qué le pasaba?

Realmente no lo entendía..

Sus emociones eran complicadas de entenderlas, demasiado.

Pero ahora el miedo lo atormentaba. Qué pasaría si un loco o una loca le hacia algo?

Él no se sabía defender. Ya era bastante complicado vivir toda su vida con una voz que lo atormentaba diariamente.

Que parece que ahora con esa voz son amigos pero eso ni siquiera lo sabía él.

Pero qué iba a saber de defenderse si alguien lo golpeara si en ese psiquiátrico lo tenían encerrado todos los días a todas horas?

Pero ahora. NECESITABA recuperar su diario.

Lo necesitaba realmente.

Ahí podía desahogarse sin que nadie lo juzgara. Y eso era lo realmente increíble de poder escribir.

Nadie te dirá nada, solamente serás tú, un lápiz, una hoja y tu imaginación.

Si somos sinceros, no hay mejor sensación que escribir.

Y Dante lo sabía.

"Qué piensas hacer?"

La voz volvió a preguntar.

-No lo sé, solo sé que quiero de vuelta mi diario.

"Fácil, pídele ayuda al paciente que se encuentra al lado de tu habitación por la ventana, que te tire tu diario y luego nos largamos de aquí"

La voz encontraba que todo era fácil o qué?

-Qué? Voy a tener que gritar y nos pueden pillar así que no, mejor nos vamos y ya.

"Dante, por favor los dos sabemos que realmente te importa ese diario. Ve a pedir ayuda"

Desconfió pero terminó haciendo lo que le pedía. Como siempre.

Mirando para todos lados por precaución se acercó al patio del psiquiátrico ya que por ahí podría pedir ayuda a su "vecina" de habitación.

El Diario De Un EsquizofrénicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora