83 Protegida

883 50 2
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Ya se sabía que eras de salir fuera de la empresa en tus días libres pero cuando no tenía mucho que hacer y los chicos preferían descansar tu salias para desestresarte.

En una ocasión tuviste la mala suerte de pasar por un temor horrible pero por suerte alguien llegó a tu ayuda.

.
.
.
.
.
.

Un día tranquilo, la lluvia caía por las calles por lo que no muchas personas de encontraban afuera así que eso era un punto a tu favor ya que nadie te podía reconocer y hacer un escándalo.

Estabas por comer un pedazo del pastel que compraste cuando alguien te interrumpió.

—Lo siento, no pude evitar mirar a la linda chica de la gorra. —volviste a ponerte el cubrebocas antes de que te viera completamente y solo hiciste un asentimiento. —Soy Jun Oh y si no te molesta quisiera saber quién es mi próxima novia. —se acerco a tu lado muy cerca de ti y te dio una sonrisa que estabas segura que tu hermano ya de la hubiera quitado de un golpe.

—Si no te molesta quisiera estar sola. —dijiste amablemente, I.M tenía razón tenías que dejar de ser tan amable.

—Oh vamos linda, no te gustaría pasar una noche más íntima con tu futuro amor. —tenías ganas de vomitar. —Por que no te quitas el cubre bocas para que te pueda ver mejor.

—Me tengo que ir, con permiso. —trataste de salir pero él no te dejó.

Las mesetas estaban en lo suyo, nisiquiera se daban cuanta de lo que sucedía.

—Por favor déjeme salir. —no sabias lo que podía pasar y el temor de apoderó de ti.

—Vamos, linda no...—alguien lo detuvo cuando quiso tocar tu rostro.

—Te dijo que la dejaras, ¿no la escuchaste?

—Oye idiota quien te dijo que podías meterte entre mi novia y yo. —por favor no le creas, era algo que te repetias en tu mente.

—¿Tu novia? —el pervertido asintió confiado y el otro chico rió sin humor. —Pues tu "novia" Resulta ser mi amiga la cual me ha estado esperando desde hace un rato y yo no te conozco. —le debías mucho ahora. —Es más la policía ya viene para acá, que tal si le explicas a ellos porque tu "novia" quería librarse de ti. —sonrió.

—Hijo de...—no término de decirlo cuando salió del local corriendo.

En ese momento sentiste como si tu alma hubiera regresado a tu cuerpo.

—No te molestara más, Mi So.—no entendía como sabía tu nombre. —Soy amigo de tu hermano, supe que eras tu por el tatuaje en tu dedo. Simon Dominic. —abríste los ojos pues no lo habías reconocido.

Simon Dominic era uno de los artistas que más escuchabas y te sentias pésimo por no poderlo reconocer.

—Gracias por ayudarme, si no hubieras llegado no se que hubiera pasado.

—Escuche todo, quería intervenir antes pero no sabía cómo, lo siento.

—No te disculpes por lo menos lo hiciste, hay muchos que solo miran y no hacen nada.

—Esas personas me dan asco. Deberías ser más grosera. —lo miraste. —Esos imbéciles no saben diferenciar entre la amabilidad y el coqueteo por lo que si eres directa desde el principio tal vez te dejen en paz.

—Lo mismo me ha dicho mi amigo, que deje de ser tan amable con todas las personas.

—No está mal que lo seas pero necesitan ser más firme ante los hechos. —asentiste.

Esa tarde cuando término de llover Simon fue quien te acompaño al departamento y hasta compartieron números diciendo que si lo necesitabas no dudarás en llamarlo.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
SI ESTUVIERAS EN MONSTA XDonde viven las historias. Descúbrelo ahora