EL REGRESO. [Draco Malfoy]

29: Fiesta de Slytherin.

Entramos a las mazamorras y las luces ya estaban apagadas, eso significa que ya estaban por empezar con la fiesta.

—Chicas CORRAN a cambiarse, yayaya.

Todas salimos corriendo hacia los dormitorios y nos cambiamos.

Yo me coloqué un vestido de encaje rojo apretado con una cartera Gucci, todo comprado de hoy.

Las chicas también se vistieron con cosas al cuerpo.

Todas se alisaron el cabello, yo opté por hacerme bucles y atar medio cabello, dejando dos mechones sueltos adelante.

—MIS LADIES, HOY NOS LUCIMOS.-Gritó Rose y todas aplaudimos.

—Si sus galanes las dejan, estoy aquí para ustedes preciosas.—Dije mientras les guiñaba un ojo y agarraba mi cartera.

Me fijé que hora era y ya casi eran las 8.30, por lo que decidimos finalmente bajar a la sala común, donde la música estaba sonando hacía media hora.

De todas formas nosotras no los escuchábamos, ya que estábamos en las habitaciones y había hechizos silenciadores en ambos pasillos para las habitaciones, los grados mas bajos estaban durmiendo.

Empecé a buscar con la vista y lo encontré.

Sus ojos grises me miraron de arriba a abajo, y se detuvieron en mis piernas.

—Estas hermosísima, Emily.

—Tu también, Draco.

—¿Quieres algo para tomar o prefieres esperar?

—Esperemos un rato, al menos hasta que la fiesta se ponga mas divertida.

-Bien, como desees.

Nos fuimos a sentar a los sillones donde se encontraban nuestros amigos.

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—Maldita seas, Carla. Estas divina.

Escuché a un chico de Ravenclaw hablando con Carla.

—G-gracias pero estoy esperando a mi pareja.

—Oh, ¿así que tienes pareja? Pues no la veo.

—Date la vuelta, idiota.—apareció Mattheo.

El chico se dio la vuelta de manera brusca.

-Fantástico, ahora ves a su pareja.

—Pues no veo mucho.—dijo el Ravenclaw.

—¿Oh si? Pues ahora verás menos.—Mattheo le lanzó un golpe de puño al chico y este no se defendió para nada. No se si fué intencional para luego hecharle la culpa o no le habían dado los tiempos.

—¡MATTHEO RIDDLE! ¿ACASO PERDISTE LA CABEZA IDIOTA? ¡TE VAN A SANCIONAR Y LE SACARÁN PUNTOS A NUESTRA CASA!—lo reté pero era como hablar contra la pared.

Y yo lo sabía.

Mattheo era jodidamente difícil de detener cuando estaba enojado.

Pero apareció Carla.

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Quedó re cortito, i know pero vienen cosas re lindas <3