Parte 8 UNA PROMESA PT. 1

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Sungmin reapareció en medio de un triunfo en aquella sala maldita y volvió a tener el éxito inaudito de la función de gala. Desde la aventura del "gallo", el actor Heechul no había podido salir a escena sin ser preso de la más cruel ansiedad, y los sitios que presenciaron su incomprensible caída se le habían vuelto odiosos. Consiguió rescindir su contrato y partió a hacer una gira por América. Lee ocupó momentáneamente, a pedido de la dirección, el empleo vacante. Y un verdadero delirio lo acogió.

El vizconde, que, naturalmente, estaba presente en aquella función, fue el único que no la paso bien al escuchar los mil ecos de aquel nuevo triunfo. ¿Para qué habló tan pronto prometiendo que partiría al Polo? Se acusó de torpeza mientras una voz lejana murmuraba en el oído del joven: "Esta noche Sungmin ha dado su alma, y no te la ha dado a ti". Y la voz proseguía: "Si no quiere decirte lo que ha hecho en estos dos días...;Si no quiere decirte lo que se ha mantenido haciendo todo este tiempo...; si te oculta el sitio de su retiro, debes ir a preguntárselo a Kyuhyun. Kyuhyun te lo dirá".

-¡Pronto!-Sungmin le dijo después de terminar la función sin preocuparse de todos los murmullos de su naciente gloria, ya con el telón abajo.

Sungmin con un ademán breve le señalo a Siwon que se dieran prisa y cuando estuvieron en el umbral, le dijo con una voz tan baja a su amigo:

-He decidido tomar un poco de aire.

Siwon creyó que le iba a proponer algún paseo al campo, lejos de aquel edificio, que detestaba como una prisión donde su pobre amigo era preso y cuyo carcelero se paseaba entre sus paredes pero Sungmin lo condujo en un recorrido, donde tenían que atravesar el escenario y donde había un oscuro pasadizo donde tenían que doblar a la derecha, Siwon lo miro y dijo:

-Sungmin, cuentan extrañas cosas respecto a los sótanos del teatro... ¿Quiere que bajemos a recorrerlos?

Al oírle decir aquello, Sungmin negó inmediatamente. Siwon clavó sus ojos en los suyos y le dijo con voz áspera:

-También he escuchado cosas que cuentan sobre él, ¿entonces ese habita ahí abajo?

-Todo lo que está bajo el suelo le pertenece.

-¿Y qué le hace sentirse seguro aquí? ¿Acaso no sale de ahí abajo?

-Ahora está encerrado ahí abajo, trabajando.

-¡Ah! ¿Trabaja? ¿Y en qué trabaja?

-Podemos estar muy tranquilos-se limitó a decir-Cuando trabaja en eso, no ve, ni come, ni bebe, ni respira... durante días y noches es un muerto vivo y no tiene tiempo para divertirse en otras cosas.

Sungmin se estremeció. Siwon no le dijo palabra. Temía que su voz lo hiciera de pronto recapacitar, deteniendo el curso todavía tan tenue de sus confidencias.

Pero entonces, un ruido extraño se hizo presente justo en aquel lugar, que no notaron quien o qué lo había hecho, dejándolos sorprendidos.

-¿Quizás haya sido "él" quien estaba allí? -acabó por decir Siwon esperando que su amigo le pudiera decir más.

Sungmin se encogió de hombros sin conseguir aparentar tranquilidad.

-No, no.

-¿Y si fuera "él", Sungmin?

-No, le repito que no. ¡No puede estar trabajando y prestándonos atención a nosotros! Y al decir esto Sungmin se estremeció de nuevo.

Al lugar que fueron los dos era a los desvanes, bien lejos de las trampas debajo del escenario. Y viendo la dirección y el motivo de la magnitud de lo que ocurría, entonces Siwon se resolvió a todo, a expresarle, por ejemplo, que definitivamente no partiría al Polo si él no le confiaba de una vez el secreto que lo atormentaba.

El Fantasma de ÓperaWhere stories live. Discover now