Por la ventana

Capítulo 5: Gallina

-De verdad me defendiste?
-Claro...pero luego te fuiste por la ventana y me arrepentí de haberlo hecho
-Agh, y luego, en el colegio, me hiciste quedar como la mala. Me hundiste la vida, Iván
-Querías que contase la historia de cómo la chi..ca que era mi amiga se fue por la ventana por ser una gallina,dejándome mal en frente de mis padres y sin un proyecto ?
-Y sabes lo que has hecho para intentar arreglarlo? Lo mismo que hiciste en el proyecto
-Tú no hiciste nada!
-No me dejabas ayudar!
-Y por qué no me lo decías!!
Me quedé sin palabras
-Me lo imaginaba. Adiós imbécil
Me pasó toda la hora de historia pensando en aquello. Porque no sé por qué nunca dije nada. Igual si soy una gallina. Pero eso solo me pasó con él. Siempre digo lo que pienso, aunque hiera los sentimientos de la otra persona.

Entonces, me importan demasiado sus sentimientos? No creo, y si es así, no debería. Ya ves como me trata. Es un ladrillo, se tomaba todo muy a pecho. Igual lo hice por eso. Aunque no sirvió de mucho, pero al menos no tuve que enfrentarme a sus padres. Al hacerlo, no pensé en como me afectaría a él.
Y qué.
Él también lo hizo mal. No me dejó disculparme, siempre me evita. No me deja ni interactuar con él. Me ha apartado de su vida, y siempre que tiene oportunidad me humilla. No se lo piensa dos veces. Bueno, conociéndome, pensará lo que hace 23 veces antes de actuar. Entonces, intenta hacerme daño? Piensa que yo le quería humillar y no es asi.

O puede que sí...yo que sé, no puedo meterme en su cabeza y saber lo que piensa. Puedo meterme en mi cabeza y lo único que sacó son más dudas. Venga Alba, puedes resolverlo, tú siempre le has mirado y has visto a un egocéntrico engreído de ojos azules y pelo rizado. Igual no es tan mala persona. Aunque, de verdad el rencor dura tanto? No soy buena en esto de la empatía. Igual soy yo la egocéntrica. No, después de eso, has hecho muchas cosas por tus amigos. Igual él también. No puedo con tanta indecisión

Vale, enumeremos las cosas. Quieres hacer el baile bien. Le has pedido ayuda a Iván. Os habéis peleado. Os han castigado para después de clase. Mierda, el castigo. Tengo que hablar con Leo. Solemos pasar la tarde juntos. Bueno, solíamos, él está ocupado con el negocio de su padre. Le encanta ayudar. Ay no, dijo que esta semana iba a poder quedar. Aunque ya no sé qué siento hacia él.

A ver, no estoy enamorada porque, bueno, eso sería una estupidez. Sé que no es amistad, porque no me suele contarle mis cosas. Lo único que tenemos en común es saltarnos las normas. La adrenalina del momento. El subidón que se siente al hacer algo que sabes que está mal.
*Riiiiiiing*

Bueno, no seas gallina y dile que no vais a quedar esta semana