Tráfico y Pasión

Capítulo 12

El sol se cuela por las rendijas de las ventanas, apoderándose de cada rincón oscuro de la habitación, iluminándolas.
Una sonrisa satisfecha se instala en mi rostro mientras me estiro y siento las suavidad de las sábanas de seda de Alex, volteo hacía un lado y tanteo en busca del calor de su cuerpo pero solo hallo, su lugar de cama vacío y desilusión.
No puedo creer que después de haber hecho el amor con el me haya dejado sola o quizás no sea tan sorprendente después de lo que hice Pienso recordando la noche anterior, no puedo entender como llame Gabe a Alex.

¿Que demonios esta mal conmigo?

Será por eso no esta aquí? ¿Se habrá arrepentido?

Suspiro cubriendo mi rostro con mi brazo, esperando unos segundos más antes de envolver la sabana a mi alrededor y dirigirme hacia mi habitación, donde tomo una ducha helada y luego llamo a Amber.

-¡¡¿Que?!!-grita haciendo que todos en el Redwood nos miren.

-Shhhh-la silencio.

-¿Gabe?¿llamaste a Alex, Gabe?-pregunta incrédula.

-soy horrible, lo sé -gemi.

-¿Como lo tomó?

-Creo que no lo escuchó.

-Eso es mierda.

-Bueno, no paró ni lo mencionó.

-Como estuvo?

-Salvaje, Alex es...- suspiro - un amante extraordinario.

Luego de contarle los detalles del encuentro y sobre mis miedos, Amber, me tranquilizó diciendo que si se fue, seguro fue debido a asuntos del trabajo y no por mí, horas después salgo del bar sintiéndome mejor.

Una vez en la mansión, me preparo un sándwich y me dirijo hacia el despacho por un libro para distraerme.
Recuerdo que cada vez que Gabe tenía prácticas de Lacrosse , me internaba aquí durante horas y cuando él acaba venía por mí e íbamos al cine, al parque o a nadar.
Tomo "La Tempestad" y me dispongo a salir ,cuando, noto un mensaje en la notebook.

Cita con Mery 9 a.m

De pronto toda mi tranquilidad se esfuma.

Otra vez Mery.

Alex me dejó desnuda y sola por irse a ver a esa mujer, mi corazón se rompe en mil pedazo y las lágrimas inundan mis ojos nublando mi vista. Ya no se que demonios pensar.

¿Quien es esa mujer? ¿Por que se citan con tanta frecuencia?

Dejo mi viejo ejemplar de Bardo en la biblioteca nuevamente y salgo del despacho, una vez que llegó a mi habitación me permito morder una almohada y gritar de frustración, por no saber nada sobre Alex.

¿Sentira algo por mí? ¿Es mery su amante? ¿Sentir celos por Alex es traicionar a Gabe?

No sé si debo buscar a Alex o fingir que nada sucedió, le doy vuelta a distintas opciones en mi mente y finalmente decido a esperarlo, preguntarle todo lo que necesito saber y acabar con el misterio.
Pero Alex nunca llegó, lo espero hasta las once de la noche pero acabo por darme por vencida. Me desvisto desganada, me pongo un camisón, me acuesto y rápidamente me rindo ante el sueño.
Horas más tarde siento un cuerpo caliente acostarse a mi lado, pero estoy tan cansada como para abrir los ojos, me remuevo pausadamente y al instante, siento que me envuelve entre sus brazos y entierra su rostro en mi cabello.

-Te amo Avery - escucho susurrar a Gabe antes de que todo se vuelva negro.