Tráfico y Pasión

Capítulo 38

Amber no, ella no, es la unica realmente inocente en esta historia.
Mi vision se nubla debido a mis lagrimas, la desesperacion se apodera de mi, cuando escucho sus gritos mientras forsejear.
Me remuevo fuertemente en mi silla pero no logro liberarme.

Debo hacerlo, lo intento, realmente lo hago, pero no lo logro.Debo salvarla, tengo que hacerlo, como lo hago?...No puedo, no puedo.

Pum.

Mi corazón late a un ritmo desbocado, el terror inunda mi cuerpo llevando hielo a través de mis venas.
No puedo moverme por un tiempo, hasta que veo el arma en mis manos.
El disparo.Yo fui quien disparo, pero no fui la única, cientos de disparos se escuchan en el exterior.
Mis manos tiemblan nerviosas, temerosa levanto la mirada de ellas y me encuentro con el cuerpo del ruso languideo sobre el Amber, lo maté.

Amber.

Intento llegar a ella pero mi cuerpo no responde, la puerta se abre de pronto y el miedo me paraliza, mi corazón se detiene, me lanzo por el arma, apunto y lo veo.

Alex.

Está aquí, vino por mi, se acabo.
Monstruosos sollozos escapan de mi boca, no puedo controlarlo.
Lloro, sus brazos se envuelven a mi alrededor, intento deshacer el fuerte agarre del arma pero no logro soltarla, oigo murmullos inentendibles o quizás, son yo en estado de shock , no lo sé, solo no llego a distinguir las palabras.
Amber, necesito llegar a ella pero mi cuerpo no responde.

-Shhhhh nena - Alex me reconforta- todo esta bien, estoy aquí.

-Amber -susurro y luego todo se vuelve negro.

No hay nada tan doloroso como perder a una persona que amas, yo perdí a varias pero eso no es algo a lo que puedas acostumbrarte, aún cuando la muerte no se hace esperar a tu alrededor.
Hubo un tiempo en el que creí que estaba maldita, solo me llevó 25 años saber que no era yo en lo absoluto, era la vida en la que nací, aquella entre las drogas, el dinero y las balas.
La muerte de mis padres, Max y Gabe no fueron las unicas, solo el comienzo, aún faltaban muchas vidas por cobrar, afortunadamente la de Amber no fue una de ellas.
Desperté en el "hospital" de mi familia hora después de ser rescatada por Alex, afortunadamente ni Amber ni yo teníamos nada mas que magulladuras y un poco de deshidratación, quizás no pude evitar que ella fuera parte de la maldita venganza de Bennett, pero si pude evitar que fuera ultrajada, de no haber asesinado a ese animal antes de que pudiera cumplir sj bajeza, jamas me lo hubiera perdonado.
Alex no se ha separado de mi lado desde que abrí los ojos, Amber descansa a mi lado, cada moretón en su bonito rostro es un catalizador para mi odio y mi rabia, Bennett logró escaparse, permanecer en el anonimato durante los últimos días, pero su fortuna no durará mucho.
Los hombres del abuelo se encargaron de llevar a cabo la limpieza, decenas de cuerpos fueron incinerados, pagaron su traición. Ninguno de los hombres de Bennett lograra descansar en paz, todos arderan en el infierno, eso se los puedo asegurar.