21. Marcado -Mewgulf -Hombres Lobo Terminada

Diez

Gulf escuchó la puerta, entonces sonrió, se levantó y caminó para abrir.

-Menos mal que llegaste, me estaba quedando dormido de nuev....o... eh tú no eres Mew, ¿Quién demonios eres?-habló sorprendido el moreno tras no encontrarse con el cazador.

-Hola, ¿no me recuerdas?.-habló una profunda y tetrica voz oculta tras un amplio sombrero, un abrigo y gafas oscuras.

-¿Por qué demonios iba a hacerlo?-preguntó este bastante asustado tras percibir su fuerte olor.

-Vaya, no deberías ser tan desagradable con tu papaito-dijo el tipo sacándose las gafas y mostrando sus aterradores ojos rojos.

—Oh joder, t-tú...t-tú...

—Así que ahora me recuerdas.

-T-Tú eres el ho-hombre lobo que nos mo-mordió a Mew y a mí, ¿qué ha-haces aquí?, ¿Cómo sa-bes do-dónde vivo?.-las piernas de Gulf temblaban ante la proximidad de este, el cual lo hacía caminar hacia atrás, mientras este avanzaba amenazador hacia el interior de su piso.

-Si, soy yo y solo he venido de visita precioso...además siempre he sabido donde vives, ya me había fijado en ti antes de morderte.

El extraño se sacó el sombrero y el abrigo también.

-E-Espera un mo-momento—balbuceó entonces el futbolista—... t-tú eres, el nuevo presidente del club, ¿No es así?-habló Gulf abriendo mucho los ojos.

-Si lo soy mi hermoso lobezno y por eso sé quien eres... Cada cierto tiempo me busco una pareja para no estar solo y bueno ya sabes...-dijo este mordiendo su labio y acariciando la mejilla del moreno quién se apartó rápidamente.

-No me to-toques, yo es-estoy con Mew... Estás lo-co si piensas que voy a tener algo co-contigo.-balbuceó Gulf apartándose del ojos rojos.

-Está bien, por hoy lo dejaremos así pero volveré.... Tú eres mío, mételo en tu peluda cabecita... No puedes huir de mí.... Ah por cierto, ese tal Mew bueno, él solo fue un error.... Él debería haber muerto pero los cazadores y los perros llegaron antes de que terminase con él... La próxima vez que me lo encuentre, terminaré lo que empecé.

Tras salir este, el moreno cerró la puerta rápidamente, mientras su corazón latía a mil por hora,estaba realmente aterrado.

Este cogió la foto del equipo donde Willy aparecía y a pesar de que los ojos de este habían salido rojos, había creído que era un efecto del flash y entonces furioso la tiró contra la pared haciendo el marco añicos.

Ya volvía a la cama cuando el timbre volvió a sonar y muy despacio se acercó a la mirilla pues temía que fuese el hombre pero afortunadamente vio a Mew y respiró aliviado.

Abrió rápidamente la puerta y tiró de él cosa que sorprendió al cazador.

-Vale... vale, cariño, wow vaya, si que me extrañabas- dijo riendo este, aunque su sonrisa decayó cuando vio a este muy nervioso, además de la extraña peste de su casa.

-Mew, él es-estuvo aquí.

-Hey... ¿qué te pasa? ¿quién vino?.

-El ho-hombre de los ojos rojos...él q-que nos mordió y nos co-convirtió en esto.

-¡Oh mierda!, ¿Vino en su forma humana?, ¿Y sabes quién era, cariño? -preguntó el cazador abrazándolo, mientras este lo rodeaba con sus brazos y apoyaba la cabeza en su fornido pecho.

-Si lo sé, aunque solo lo vi una vez en persona.

—McIntosh—habló Mew—... Sabía que no era de fiar cuando lo vi en esa fot...

—Mew, eso no es lo peor... él di-dijo que me convirtió para que fuese su pareja y que tú sólo fu-fuiste un error... Su intención e-era que no sobrevivieras... e-estoy muy a-asustado...No quiero que te haga da-daño y mucho menos pasar el resto de mi vi-vida con él.

Mew lo rodeó con sus brazos nuevamente y le besó la cabeza.

-Tranquilo mi amor, eso no va ha ocurrir.... Yo jamás voy a dejar que nos separe, te protegeré...ese hijo de puta no va ha robarnos nuestra felicidad.

......

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