Ambos son orgullosos, nerviosos, no tienen rumbo y están solos. Pero, ¿Qué queda cuando todos los que aman los abandonan?
Mikasa tiene cuidado de tocar a Levi. Mientras que Levi tiene miedo de tocar a Mikasa. Ambos aterrorizados de que se conviertan...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
〚MIKASA〛
Un cuarto antes de las quinientas horas, se encontró contemplando el apacible sueño de Annie y Falco. Mikasa dejó que sus dos visitantes durmieran con ella, dejando a Levi dormir en el sofá.
Es curioso, porque Levi es el verdadero dueño de la casa, sin embargo, fue él quien de hecho sugirió esa idea, ya que no tenían habitaciones para invitados. Mikasa le dijo que lo acompañaría a su habitación, pero él simplemente se negó por dos razones obvias: Levi no quiere que los dos mocosos entrometidos piensen algo malicioso, y, para empezar, ni siquiera tiene cama. Por eso durmió en el sofá.
Sin poder conciliar el sueño de nuevo, se levantó de la cama al amanecer y dejó a sus dos visitas roncando. Mikasa recordó las cosas de las que habló con Annie anoche, algo que, de alguna manera, la alivió. Volvió a mirar a la cama, observando los severos rasgos de la rubia, aunque ahora lucia tan tranquila y delicada.
Se preguntó, ¿Cómo puede Annie poseer la valentía de no derrumbarse? ¿Cómo sigue adelante? ¿Y cómo tuvo las agallas para hablar con ella sobre Armin?
Mikasa podía ver la forma en que los ojos de la Titán Femenina brillaban cada vez que le hablaba sobre momentos de su infancia con Armin. Annie escuchó atentamente, parecía saborear cada palabra, aprovechando cada recuerdo que pueda absorber. La mezcla de dolor, tristeza, felicidad y nostalgia simplemente se funde en aquellos ojos azules, agregando un color vibrante.
Si eso no es lo que significa amor, entonces, tal vez Mikasa no lo entendería.
Ella sonrió al pensarlo, feliz de que su hermano fuera amado más allá del infinito, incluso antes de morir. Solo puede esperar que Annie siga adelante eventualmente, llevando los recuerdos de Armin en su corazón, mientras sonríe y vive la vida que también le espera. Suena absurdo e increíble, pero Mikasa quiere lo mejor para la Titan Femenina.
Cerrando la puerta detrás de ella, caminó y encontró a Levi durmiendo en el sofá de su segundo piso. Avanzó en silencio, abriendo un poco las cortinas para poder estudiar los rasgos de su compañero.
La verdad es que Mikasa ha estado haciendo esto casi todos los días. Insistiría en levantarse antes que Levi, solo para poder verlo dormir. Ella no lo sabe, pero desde que él empezó a compartir la cama con ella (por supuesto, solo para dormir), sus rasgos se volvieron más suaves, como si no hubiera rastros de la guerra en su rostro.
Sus propias pesadillas también comenzaron a desvanecerse, ahora sólo soñaba con el vacío y, a veces, con aguas tranquilas. No puede darse cuenta de si ha estado descansando bien debido a su nueva vida, o simplemente por la persona que ha estado durmiendo al otro lado de su cama.
Mikasa notó que la manta se había desacomodado, dejando a Levi en una posición acurrucada. Suavemente tiró del edredón, con cuidado de no tocarlo, luego lo cubrió con ternura hasta el cuello.
