T2: Capítulo 14

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___ P.O.V

Me tiré en la cama a llorar, realmente me siento mal por haberle hecho eso a Nash, pero lo que tenía Chris en las manos era mi sueño.

Realmente no se si lloro por impotencia, por rabia o simplemente porque todas las cosas se me tuercen.

[...]

Alguien llamó a la puerta, yo le dije que pasara, y era Nash.

Le hice un hueco en un lado de la cama y se tumbó. Me giré para mirarle y el estaba mirándome con sus ojos azules, sus increíbles ojos azules, de los que me enamoré, solo que esta vez tenían una gran diferencia, sus ojos estaban tristes por lo que yo le he hecho, por todo el daño que le he hecho.

No pude aguantar más y empecé a llorar y Nash también, él me abrazó y yo no me aparté, no quería apartarme, a pesar de todas las cosas le sigo amando.

- Verás Nash... -Le intenté decir, pero él me interrumpió.

-___. Yo tengo toda la culpa, no debería de haberle juzgado, no le conozco realmente bien, no soy ni tu novio ni nada, y no tengo derecho a decirte lo que tienes que hacer y juzgar a las personas. Solo te digo que, si realmente quieres intentar estar con él, yo lo aceptaré, y seré otro hombro en el que puedas apoyarte siempre, aunque me duela porque eres lo que más quiero en este puto mundo. -Me dijo Nash llorando.

En ese momento cogí y le besé, fue algo espontáneo, era lo que sentía, lo que yo quería, porque a él es el único al que quiero.

- Nash, yo no quiero estar con Chris, él es solo un amigo que me ayuda, no le veo como nada más, con el único que quiero estar es contigo, porque a pesar de todo te sigo amando, a pesar de todo el tiempo que ha pasado y las circunstancias, solo te quiero a tí, siento haberte hecho daño. -Dije abrazándome a él con todas mis fuerzas.

- ____, eres la única persona que me hace feliz, hacía mucho tiempo que no me sentía bien. Cuando no te veía todos los días con tu preciosa sonrisa no podía ser feliz, debería haber estado a tu lado cuando pasó lo de tus padres, debería haberte dicho que te quedaras conmigo, pero fui muy gilipollas.

- Nash, no pasa nada, ahora estoy aquí.

- ___, me gustaría intentarlo contigo otra vez, pero no estoy seguro de que tú quieras.

-Pues te equivocas.

Me puse encima de él y le besé y abracé.

-Bueno, es tarde, me voy y te dejo descansar - Me dijo él.

-No, por favor, duerme conmigo esta noche.

Le hice un hueco en la cama otra vez y se tumbó, me abrazó por la cintura y me quedé dormida.

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- Buenos días enana

- Buenos días. -Le dije a la vez que le besaba.

-Vamos a desayunar.

- No quiero.

- Si quieres.

- No.

Dicho esto Nash me cogió en brazos, me bajó corriendo a la cocina y me dejó encima de la encimera.

- No intentes escapar, el suelo es de lava. -Me dijo Nash.

- Eres tonto. -Dije riendo.

- Pues este tonto te va a hacer el desayuno, dime, ¿Qué quieres para desayunar?.

- A tí -Le dije bajándome de la encimera, subiéndome a su espalda y mordiéndole la oreja.

Nash me cogió y me dejó en el sofá. Se puso encima mía y comenzó a besarme apasionadamente, yo comencé a quitarle la camiseta, dejando sus abdominales a la vista, me mordí el labio y lo acerqué más a mí enrollando mis piernas en sus caderas. Él me quitó la camiseta y se mordió el labio, cada vez era todo más apasionado, pero algo nos interrumpió. Se escucharon pasos bajar por las escaleras y yo me puse la camiseta como pude y me levanté del sofá.

La Edad No Importa (Nash Grier)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora