AMOR SIN FIN

CAPITULO 52

El no lo podía creer...lágrimas corrian por su cara mientras que él procesaba lo que habia pasado. El recordó aquel sueño que él había tenido el día antes...ahora él lo entendia – no era Aldo quien iba separarlo de Lety, era Don Erasmo. El pensó de cómo Lety se deberia de estar sintíendo en ese mismo momento...él sabia lo importante que Don Erasmo era para ella. Escogería Lety a su padre sobre él? El trato de no pensar acerca de eso...lo unico que queria ahora era hablar con Lety.

Dona Julieta bajó las escaleras el mismo tiempo que Tomas se dirigía al cuarto de Lety...ella lo detuvo, le dijo que Lety necesitaba estar sóla. Ellos se sentaron en la mesa y se tomaron un té para los nervios. Ellos hablaron acerca del posible embarazo de Lety mientras que arriba Don Erasmo pensaba de lo mismo. El simple pensamiento de que Lety estubiera embarazada fuera del matrimonio atormentaba Don Erasmo – cada vez que él pensaba acerca de eso, él se enojaba mas con el hombre que había destruido la imagen que él una vez tuvo de su hija...el desgraciado de Fernando Mendiola.

E: Cómo pude ser tan ciego?

El se preguntaba cuanto tiempos ellos estaban juntos...él recordó todas esas noches cuando Lety lo llamaba y le decia que iba llegar tarde...por supuesto él permanecia la calma porque sabia que ella estaba con él – con Fernando Mendiola quien él confiaba incondicionalmente. El hombre que una vez le prometió que él ayudaría a proteger a Lety. Qué eran sus intenciones? La amaba? Estaba él dispuesto a casarse con ella si estaba embarazada? Don Erasmo lloró silenciosamente en ese dormitorio oscuro...se preocupaba por Lety – lo unico que el tenia claro era que él nunca mas queria ver a Fernando Mendiola y él se prometió a si mismo que él se cercioraría que Lety nunca lo viera otra vez tampoco.

Lety lloraba todavía incontrolable como ella recordaba lo que Don Erasmo había dicho...él le dijo a Fernando que el estaba prohibido de ver a Lety, dijo que él nunca lo aceptaría...ella se sentía más sóla que nunca. Su papá no les había dado la oportunidad de explicar - ella no tuvo la chance de decirle lo enamorado que ellos estaban – cómo Fernando le había pedido que fuera su esposa en ese viaje de Francia. Ella continuó llorando como ella miró su anillo de compromiso, ella reaccionó una vez su celular empezó a sonar. Ella lo alcanzó, ella trató de esconder su tristeza cuando ella contestó pero era inútil – él sabia lo triste que estaba...él estaba en el mismo infierno que Lety.

F: Cómo estas mi amor?"

Fernando preguntó preocupado.

Lety trató de mentirle a Fernando diciendole que ella estaba bien pero él no le creyó...él la conocia bastante bien. El le dijo que todo se arreglaria y que nada ni nadie los separaría – ni Don Erasmo...Lety se quedo callada con en el comentario. Fernando presintió que algo le pasaba entonces el le preguntó si ella tenía dudas acerca de su relación con el. Ella confesó que ella se sentía culpable por mentirle a su padre pero que finalemente ella no permitiría que nadie los separara tampoco. Fernando se alivió al oír esto, Lety reiteró que dandole tiempo a su padre sería lo mejor...entonces ella propuso que se distanciaran por un rato – dandole tiempo para que Don Erasmo aceptara su relación. Fernando se negó bravamente, él comentó que alejandose de su lado era imposible especialmente ahora cuando ella podría estar embarazada.

F: Leticia yo no te voy dejar sola especialmente ahora y no lo voy a discutir mas (él agregó cuando ella hizo para interrumpirlo) Ahora, mañana por la mañana yo te voy a buscar para ir al médico – veremos si estas embarazada o no.

Lety le recordó que Don Erasmo no lo queria ver en su casa, Fernando entonces le recordó a Lety que él iría verla a ella no a su papa – y si era necesario, él confrontaría Don Erasmo una vez por todas. Lety se sentía mejor sabiendo que Fernando no se iria de su lado – él se quedaria a su lado pasara lo que pasara, él lucharía por el amor que ellos se tenian.

Lety terminó la conversación con un dulce adiós...ella todavía no se sentía bien – ella se convenció que por la mañana todo sería mejor...o por lo menos eso era lo que ella esperaba. Ella se quedo durmia muy cansada de los acontecimientos de la tarde...Fernando se metió en la cama preocupabo por el estado de Lety – podría estar ella embarazada? Y si ella estaba, por cuanto tiempo? Ellos solamente se habian reconciliados hace muy poco...él recordó todas las veces que él había estado con ella. Definitivamente no podría ser la primera vez (era hace mucho), la segunda vez en el departamento de Omar (imposible también era hace rato), la noche antes que ella se fuera para Acapulco? Había sido tan espontáneo...eran casi dos meses al día que ella se fue. Podría ser uno de las dos noches apasionadas que ellos compartieron en Francia? Eso era demasiado temprano...él continuó analizar si Lety estaba embarazada o no hasta que se quedo dormio...soñando de lo que sería tener un hijo con Lety, una sonrisa aparecio en su cara mientras durmia pacíficamente.

La mañana llegó rápidamente...Fernando se arreglo y salió precipitadamente hacia la casa de Lety para recogerla. El llegó al frente de la casa de Lety...respiró profundamente antes de caminar hacia la puerta y golpear. Dona Julieta abrió la puerta con indecisión...sorprendida de ver Don Fernando allí.

F: Por favor Dona Julieta dejeme entrar...vine a recoger a Lety para llevarla al hospital para ver si está embarazada.

Dona Julieta señaló rápidamente para que Fernando entrara...ella le informó que Don Erasmo se había ido para el periódico y que él regresaría en cualquier momento. Ella se apuró para avisarle a Lety antes que Don Erasmo apareciera y viera a Fernando. Fernando espero con paciencia mientras que Dona Julieta iba a decirle a Lety que el habia llegado.

Fernando miraba los muchos cuadros que habían en la pared...sonriendo por lo inteligente que era su Lety cuando la puerta de la casa se abrió. Fernando dio la vuelta para ver Don Erasmo entrar...Don Erasmo se sorprendio a ver ese hombre en su casa otra vez. Ellos se miraron fijamente el uno al otro – ninguno capaz de hablar hasta que ellos oyeran Dona Julieta gritar desde arriba.