Anoche volví a la escena del crimen.
Después de tantos meses,
volví a dormir en aquél colchón.
Y ésta vez, era demasiado grande.
Pensé en como la última vez, peleábamos por no acabar en el suelo, nos faltaba espacio para ensancharnos, el alma y las ganas de comernos a besos y a caricias.
En esta ocasión,
las paredes parecían echarse encima, pero lo peor de todo,
fue el puto frío.
Sin tus brazos sobre mi piel desnuda, dibujando mapas con los dedos en mi espalda.
Y fue el despertar del día siguiente, lo que terminó conmigo.
El no verte tumbado,
a mi lado.
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Perdón mamá, estoy borracha.
PoetryEn el borde de la desesperación, me uno a los tantos que maldicen aquello que llaman amor. Desde este bar, hago un llamamiento a todas las personas con un agujero en el pecho, o que guardan todo su afecto por alguien que no les sabe valorar. Brindo...
