Hacía tiempo que había dejado a un lado su inmunidad. Ya no sentía ni padecía
ni de males ni de verdaderas alegrías.
Caminaba por las calles de la ciudad con paso firme, dejando un rastro de deseo mezclado con su colonia barata.
Sonreía aquellos que miraban su culo pasar, y sus piernas, tenían un precio muy alto que más de uno no le importaría pagar.
Ella era locura,
un matojo de nervios dispuestos a romper con todo, incluso corazones.
Aún recuerda el primer pobre corazón que rompió, le costó tres noches de insomnio
pero al segundo, ya era una experta.
Ella, que siempre va con cerveza en la mano y droga en sus labios.
Buscando algo de diversión en las noches y calma por las mañanas.
No se ata a nadie
No da explicaciones, ni quiere responsabilidades.
Ella, que ni sabe lo que quiere pero con las ideas más claras
arrebata la cordura a cualquier persona que se interponga.
Ella es una revolucionaria
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Perdón mamá, estoy borracha.
PoetryEn el borde de la desesperación, me uno a los tantos que maldicen aquello que llaman amor. Desde este bar, hago un llamamiento a todas las personas con un agujero en el pecho, o que guardan todo su afecto por alguien que no les sabe valorar. Brindo...