Strangers ✔️

12 |Faith me hace una propuesta indecente|

Hannah

Girls — Girl in red

Era extraño sentirse de esa manera al estar cerca de alguien y en realidad no sabía si me terminaba de gustar que la castaña tuviera ese efecto en mí. Era un sentimiento nuevo.

Le tomé de la mano con cariño y con la poca confianza que me quedaba entrelacé mis dedos con los suyos, evitando su mirada. Estaba nerviosa, pero eso no me impidió avanzar hasta mi destino con decisión.

Abrí la puerta de la pequeña terraza y cerré los ojos cuando la brisa me dio de frente, despeinándome en el camino. Volteé a ver a Faith, quien me estaba observando con una sonrisa, y no pude evitar el hecho de ponerme roja. Estaba muy nerviosa y Faith no dejaba de mirarme de esa manera.

—Agh, eres adorable. —empezó a chillar Faith, entrecerrando los ojos en mi dirección. Tragué saliva y deshice nuestro agarre para tallarme la cara, avergonzada.

Mierda, mis mejillas aún se sentían calientes y sus palabras no ayudaban mucho que digamos. Me alejé unos pasos de ella y la invité a cruzar conmigo a la galería.

—Cállate —reproché, nerviosa—. Aquí estaremos cómodas.

La terraza era pequeña, pero acogedora. Contaba con una pequeña vista al jardín y a la piscina natural del hogar; Y junto a los butacones que mi madre había comprado la semana pasada se podría considerar como un buen lugar para pasar el rato.

—Uy, ¿ya puedo hacer oficial que mi novia me va a mantener? —bromeó, agitando las pestañas con coquetería.

—Solo me quieres por mi dinero, ni siquiera te gustan las chicas. —Le seguí el juego, mientras acomodaba mi cabello.

—Bueno, pero me encantas tú.

Era un manojo de nervios al tenerla cerca, así que fue un gran alivio no empezar a balbucear como loca frente a ella.

—¿Quieres que te ayude con eso? —preguntó la castaña, refiriéndose a mi pelo, el cual se había enredado un poco por el viento.

Asentí, ganándome una sonrisa de su parte. Se acercó a mí y acarició mi mejilla con delicadeza antes de llegar a mi cabello, y empezar a trenzarlo. Un calorcito agradable se extendió por mi pecho, haciéndome sonreír como una completa boba. Traté de olvidarme de los sucesos anteriores y enfocarme en ella. Sonreírle y hacerle saber que, a su lado, todo estaba bien.

—Te vi saliendo con Clarke, ¿cómo te fue? —La escuché suspirar después de su confesión. Los recuerdos de hace rato volvieron a mi mente, dejándome sumergida en una burbuja de emociones negativas por un momento, pero me recompuse rápidamente para darle la razón con un seco ''pudo ser peor''—. Llegué hace mucho, pero... eh... decidí esperarte.

—Lo siento. —me disculpé—. ¿Llevabas todo ese tiempo fuera de mi casa? —cuestioné, retorciendo mis dedos.

—No —mofó, riendo por lo bajo. Terminó de trenzar mi cabello y me pellizco la mejilla con suavidad—. La verdad es que di unas cuantas vueltas para no aburrirme. Quería verte... Supongo que por eso estoy aquí de intensa.