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[Volverte a ver]

Fanny.

—Amor.— Me encontraba mirando por el ventanal de mi balcón, la noche era fría y no había ruidos más que el de los autos de la vía. Pero la voz de mi esposo me hizo salir de mi disfrute mental

—Mario— Gire mi rostro para verlo, parado en el marco y mirándome mientras se quitaba la chaqueta.

—¿En que pensabas?— Se acercó a mi luego de quitarse la chaqueta y darme un beso suave en los labios

—Nada, solo veía la calle mientras te esperaba para cenar— Le sonreí y toque su mejilla por un instante

—No tenias que esperarme amor, sabes que iba a llegar tarde, te dije esta tarde que tenía muchos documentos y cosas por firmar del banco.— Coloco parte de mi pelo que se encontraba tapándome la vista detrás de una oreja

—Igual, mañana debo irme y no quería pasar mi ultima noche contigo así.

—¿En serio tienes que irte? Ya llevas muchos años en la voz, el director va a entender que quieres pasar este año conmigo...— Rode mis ojos y es que, me enoja. El sabe que amo esto, amo la voz y amo a los niños y simplemente quiere retenerme aquí en Peru

—Te dije que si Mario, no quiero discutir sobre eso. No hoy, aparte sabes que nada me hará cambiar de idea, sabes que puedes ir a visitarme cuando quieras y quedarte en mi casa.

—Lucia, somos esposos. No podemos estar separados y tener casas separadas

—Entonces múdate conmigo a Colombia, tú sabes que yo no dejare mis cosas.— Di de hombros

—Yo tampoco puedo dejar las riendas de la empresa, entiende mi amor. El apellido Brescia se iría abajo— Colocó una mano encima de mi hombro

—Entonces no te quejes, tú tienes tus cosas y yo tengo las mías. Aparte cuando decidiste casarte conmigo supiste las consecuencias— Camine hacia la cocina pero el vino tras mío

—Está bien ya. No discutamos por esto— Me abrazo por detrás —Mejor déjame disfrutarte esta última noche.

Sonreí con picardía y me di la vuelta para quedar frente a frente.

—Primero cénenos y luego pasemos a lo otro— Mordí mi labio inferior, aguantándome las ganas. La verdad Mario sabe satisfacer mis necesidades sexuales.

—Bueno...— Dejó un último beso en mis labios y me tomó de las manos para dirigirnos al comedor
—Oye.

—¿Si?— Lo mire al momento de sentarme

—Te amo.— Sonreí por aquellas dos palabras que salieron de su boca y le tomé de la mano una vez más por encima de la mesa.

La verdad no soy capaz de responderle con la misma palabra, no lo amo. Lo quiero muchísimo si, es un buen amigo, acompañante y confidente. Pero desde la infidelidad de Juan Carlos no he vuelto a amar a nadie. Me volví de hierro y nadie logra entrar a mi corazón.


Sebastian

Me encontraba en un club nocturno, estaba sentando en un area vip del lugar mientras disfrutaba el show de la morena frente mío bailando en el tubo. Di un trago de mi Whisky a la roca y sentí El Fuerte alcohol bajar por mi garganta pero ya estoy acostumbrado a esto, no me afecta.

Cuando la morena de largas piernas estuvo cerca de mi y mirándome con picardía sin parar de bailar la tome del brazo con brusquedad la senté en mi regazo y la besé con rapidez y desesperación. Tome su pelo y la agache con delicadeza hacia mi miembro erecto, no tardo en abrir el zipper de mi pantalón y mover de arriba hacia abajo mi prepucio, haciéndome gruñir por el rico extasis que me producía este momento, visualicé a una rubia mirando con atención lo que sucedía y le hice señas de que viniera hacia acá. No tardo en ponerse de pie y con una sonrisa vino hacia acá, la empecé a besar mientras la morena seguía con el trabajo de mi miembro. Minutos después tome del pelo de la rubia y la guíe con la morena, observe cómo se besaron entre ellas para luego ambas jugar, besar y tirar saliva en mi glande. Así fue todo hasta que llegue a mi orgasmo, haciéndome gruñir por el placer momentáneo

Unfaithfully yours |Infielmente tuya| [Yatralu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora