XIX

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[Para siempre]

Narradora Omnisciente

La noche fue serena, a pesar de que Martina descubrió aquella infidelidad prefirió ser inteligente y rigurosa, la maldad e ira corrompía sus venas pero sabía que un mal paso y todo se iría a la mierda.

A la mañana siguiente prefirió no hablar con Sebas sobre ello; el trato fue como siempre y la rutina de Sebastián fue la misma para dirigirse a el estudio de La Voz a realizar su trabajo y con ansias y ganas de ver a su hermosa rubia. Por otro lado Fanny, al despertar tomó la iniciativa y tiempo para hablar con Mario, no podía dejar clavos sueltos.



Fanny

—¿Te sientes mejor?— Pregunte, sentada en el comer frente a él mientras desayunábamos, solos, ya que aún mi madre no estaba lista

—No. pero ya me tome una pastilla ¿Podemos hablar de nosotros?— Pidió con un tono de voz bajo por el dolor de cabeza que traía

—Claro. ¿De que quieres hablar?— Di un trago de mi taza de café sin quitar mi vista de el

—Ya no eres la misma conmigo, es cierto que nunca has sido amorosa conmigo pero ni siquiera tenemos sexo ya.

—¿Estas así por que no hemos tenido sexo?— Negué, no pude evitar reír

—dime algo Fanny ¿Tienes otro?— Su semblante se colocó más rígido de lo que se encontraba y sus ojos conectaron con los míos, gracias a eso me tuve que colocar seria una vez más.

—Mario...— Suspire —Sabes como soy, no me gusta que se metan en mis cosas... No estoy con nadie pero solo te pido mi espacio, sabes que cuando estoy en mi trabajo me despego del mundo, no tengo tiempo para ser la esposa perfecta del empresario más rico de Perú y si eso es lo que buscabas antes de estar conmigo entonces te equivocaste de esposa. Solo te pido espacio en lo que arreglo mi vida ¿Si? Sólo eso

—Y lo tienes, te juro que trato entenderte pero...— El sonido de su teléfono lo hizo guardar silencio
—Disculpa es del trabajo.— Asentí y se puso de pie para contestar. Estas llamadas que le entran me libran de dar explicaciones o escuchar sus tonterías de "buen esposo"

Me tome la ultima gota de café que quedaba en la taza y con una servilleta limpie mis labios, observé a Mario y seguía hablando por llamada así que me puse de pie y subí por mi madre para irnos ya que se nos hace tarde.

—Ma— Toque su puerta dos veces —Vámonos ya

—Espérame en el auto que estoy arreglando
mi bolso— Gritó desde adentro

—No tardes— Grite eso último y bajé una vez más donde observé a Mario ya una vez más sentando en el comedor —Nos vemos más tarde.

—¿No olvidas algo?— Pregunto mientras yo iba por el pasillo del Lobby ya, retrocedí un par de pasos
Y observé una sonrisa en su rostro, pícara para ser específica. Intenté recordar que olvidaba

—Si, cierto.— Asentí con una sonrisa varías veces y el igual hizo la misma acción. Caminé hacia la mesa y tomé mi celular que lo había dejado en ella
—Muchas gracias por recordármelo— Me di la vuelta una vez más con rapidez

—No, pero yo no...— Fue lo ultimo que escuché antes de cerrar la puerta del departamento y haber salido.

Baje al estacionamiento y calenté un poco el auto en eso mi madre bajó y conduje hacia el estudio de La Voz.







(...)

Una vez más la misma rutina de las súper batallas, hoy era el equipo de Yatra con tres de sus mejores niños; Jorge, Juanse y Monserrath. Siendo sincera los tres son buenísimos, pusieron a Sebas entre la espada y la pared pero al finalizar eligió a Juanse y es obvio, es su favorito desde las audiciones.

Unfaithfully yours |Infielmente tuya| [Yatralu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora