IV

214 24 130
                                    

[Luna llena]

Fanny.

Mientras conducía no podía dejar de pensar en Sebas, ese beso me llevó al cielo. Nadie me ha besado así, sentí que mis labios eran de su pertenecía pero ¿que diablos está pasando en mi mente? Lucía Martínez ¡Estás casada! ¿Cuando vas a entender eso?

—¡Fanny!— El grito de mi nombre proveniente de mi madre en el asiento de copiloto me hizo girar rápidamente el auto y frenar repentinamente, por estar en mis pensamientos casi chocó con un póster —¿Donde tienes la cabeza hija? Casi chocamos.

—Perdón, estoy muy agotada.— Deje caer todo mi cuerpo en el asiento, aún parqueada

—¿Quieres que conduzca yo?

—Por favor.— Asentí varias veces y salí para cambiar de asientos con mi madre y acostarme un poco en el asiento de copiloto mientras mirada por la ventana

Encendió el auto y entró una vez más a la vía para conducir con toda su precaución.

—¿Tuviste un día agotado?

—Si, me duele todo— En realidad no. Pero no le diré mamá besé a Sebastian y ahora no me lo puedo sacar de la cabeza. Estoy casada y digamos que fui infiel

—Cuando lleguemos a casa te haré un té para que te relajes.

—Está bien.

Al llegar a casa como dijo me preparo un té y luego subió a su habitación, yo mientras salí al balcón para ver como la luna ilumina mis ojos, esta noche era luna llena. Cerré los ojos para recordar cómo disfrutaba ver las noches con mi padre, era mi hobby favorito y simplemente el hacerlo me produce sentirlo cerca. Mientras me encontraba con ojos cerrados y una sonrisa se formó en mis labios al sentir una fuerte brisa de la hermosa noche abrazar y cubrir mi cuerpo, abrí los ojos segundos de que esté finalizará y limpie una lagrima que iba deslizando mi mejilla, sin darme cuenta ya otras iban deslizándose.

—Te extraño pa— Susurre y di un sorbo de mi taza de té.

Sebastian

Me encontraba en el jardín de mi casa observando el cielo, las hermosas estrellas que no dejaban de titilar. Brillan tanto o menos que Lu, Ella Es arte, Es ternura, amor y alegría pura. Hoy logré conocer unas cuantas cualidades de ella y son hermosas, lo que más me encanta es que pude probar sus labios, son tan suaves, deseables, carnosos. Pero debo sacarla de mi mente y pensamiento, Sebastian Yatra no se enamora de nadie.

—Amor ¿Vienes a cenar?— Salí de mis pensamientos al sentir como Martina colocó sus manos alrededor de mi cintura.

—Si, dame un segundo.— Conteste sin mirarla

—Está bien...—Contestó dudosa y se dio la vuelta yéndose hacia adentro.

Mire por última vez las estrellas y una brisa me hizo erizar. Sonreí por ello y a segundos de su final entre a casa para cenar con mi esposa.









(...)

—¿Tú le vas a creer a eso dos?— Hizo puchero
—Mírales esas caras de maldad, es mejor que te vengas conmigo, solo conmigo.— La abrazo y La Niña de igual forma a ella. —Ya me debo ir a sentar pero piénsalo bien ¿Si?— La niña asintió con una sonrisa y Lu regreso hacia su silla

La verdad es muy buena con los niños, la mayoría de niños están yéndose con ella y es que tiene ese don de niña en su interior, los conquista.

—Amo a los tres... Pero me voy con— Nos lleno de suspenso eso a los tres en nuestras sillas

—Yatra— Sonreí como triunfador y fui a abrazar a mi nueva integrante del Team Yatra

Unfaithfully yours |Infielmente tuya| [Yatralu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora