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Un día me di cuenta que tu presencia ya era indispensable en mi vida.

Tus sonrisas, tus alagos, tu calidez, tu persona, todo tú.

—Hoseok —oí através del altavoz de mi teléfono, hoy el que te había buscado era yo. Ya había pasado dos días desde que hablamos por última vez.

Así que te llamé, solo quería escuchar tu voz. Me hacías falta.

—Yoongi, hola —salude contento, alfin volvia a saber de ti —¿Cómo estás? —pregunté.

Se escucho ruido del otro lado, supongo que te habías movido.

—Estoy bien hobi —dijiste en voz baja, como susurrando, o tal vez solo estabas durmiendo y te desperté—¿Y tú cómo estás? ¿a qué se debe tu llamada?

—Uh, solo quería saludarte, hace dos días que no hablamos —dije mientras jugaba con un mechón de mi cabello. No sé porque me sentía tímido, pero eso no quitaba la sonrisa de mi cara.

Oí como suspirabas.

—Es cierto, lo siento hobi, he estado ocupado —dijiste—Pero hey, por qué no sali-... —de repente se escucho una tercera voz.

—Yoongi ven a acostarte, hace frío —dijo una voz melosamente que logré identificar como la de un hombre. ¿Acostarse? ¿En dónde se suponía que estabas?...¿Con quién estabas? ¿No estabas muy ocupado?. Esas y más preguntas inundaron mi cabeza.

—Shh, cállate —oí como le susurrabas a la otra persona, pero rápidamente aclaraste tu vos y volviste a dirigirte a mí, que me había quedado en silencio, —¿H-hoseok? ¿Sigues ahí? —sonabas nervioso.

Reaccioné, —Ah, sí, aquí estoy — respondí.

—B-bueno...como te decía, podemos salir mañana a alguna cafetería, ¿qué te parece? —dijiste, como si lo anterior no hubiera pasado, decidí que no debía tomarle importancia.

—Claro, me encantaría —respondí, decidimos en dónde y a qué hora nos veriamos, hablamos un poco más, y luego dijiste que debería irme a dormir, así que te hice casó y nos despedimos.

—Entonces...te veo mañana Yoongi —dije mientras me recostaba y me tapaba con las sábanas—Descansa.

—Descansa también hobi —y colgaste.

Despegue el teléfono de mi oreja y me quedé viendo la pantalla, en donde decía, “llamada finalizada” y una foto de ti durmiendo de fondo de pantalla.

¿Es raro tener a tu amigo de fondo de pantalla? ¿No verdad? ¿Es raro extrañarlo demasiado y pensar en él todo el día? No, claro que no. ¿Es raro sentirme dolido por pensar en que pudieras estar con otro persona que no fuera yo? No...es demasiado raro.

Todo este tiempo he pensado que lo que siento por ti es raro, porque esto va más allá de una amistad.

Y por fin le hago caso a lo que dice mi corazón.

—Estas enamorado Hoseok —escucho a mi corazón decir, y me sorprende cuanta razón tiene, y lo acepto. Porque alfin me doy cuenta que todo este tiempo lo estuve, pero por miedo no lo aceptaba e ignoraba.

Ahora finalmente lo acepto, pero eso no me quita el miedo.

Miedo, porque todos dicen que enamorarse es peligroso, pero recuerdo que también dicen que vale la pena arriesgarse.

Así que con lágrimas en los ojos digo en un susurro; —Estoy enamorado de ti Yoongi —mis palabras quedan atrapadas en las cuatros paredes.

Y con ese pensamiento, mis ojos se cierran y me quedo dormido.

Esa noche soné contigo.

G A M E →YoonseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora