Capítulo veinticuatro

291 34 2
                                    

- Termino de ordenar estas carpetas y estoy lista.-
- Betts, ya vamos tarde al doctor. Sigues después.- Entró a la habitación.

- Señorita Cooper, por favor vaya a subirse a la camilla.- Indicó el doctor.
- Ok.- Sonrió para subirse a la camilla y luego subirse la camiseta.
- Esto va a estar un poco frío.- Tomando el gel.

- Bueno, ahí está su bebé.- Señaló la pantalla.
- No veo mucho.- Dijo Jug.
- Es muy pequeño, solo tiene seis semanas y media, casi siete, de gestación, mide un par de centímetros apenas.-
- Pero por lo que se ve está todo en orden.-
- ¿Ya podemos escuchar sus latidos?.- Preguntó Betty acariciando la mano de Jug.
- Sí.- Asintió y presionó la pantalla.

Luego de unos segundos Jughead sacó su celular y comenzó a filmar.

- Hoy es 20 de enero de 2020, es nuestra primera cita con el doctor, mamá tiene seis semanas de embarazo y eso que se escucha de fondo son los latidos de tu corazón. Aún eres muy pequeñito como para poder verte, pero ese eres tu y él es el doctor que te traerá al mundo.- Dijo Jug mientras documentaba todo.
- Te amamos.- Decía  apuntando a Betty quien lo miraba sonriendo.
- Luego le envío eso a Archie.-
- Señorita, límpiese con esto y arréglese, ya estamos listos.- Les sonrió.
- Solo puedo decirle que tenga cuidado, no haga mucha fuerza, evite estresarse y las emociones fuertes. En este trimestre pueden ocurrir accidentes.-

🔜🔜🔜

- ¿Ya sabes en qué hotel nos quedaremos en Londres?.-
- Sí, la editorial ya tiene todo reservado, hasta los boletos del avión.-
- ¿Informaste que yo iría contigo?.-
- Sí, también que estás embarazada y sobre tu alimentación.- Le sonrió.
- Eficiente.-
- Siempre.-

- Jug... estuve pensando en algo importante...- Dijo separando su vista de la televisión.
- Sí sé que si el bebé es niño no le pondremos mi nombre. Yo sufrí de pequeño, no quiero que él también lo haga.- Se rió.
- No es eso. Ni siquiera he pensado en nombres.- Se rió.
- ¿No lo has hecho?.-
- Nop.- Negó.
- Yo tengo una lista.- Sacó su celular y le mostró una nota en el celular.
- ¿Olimpia?. ¿Gadiel?.- Leyó.
- Bueno, no me gustan tanto pero suenan fuertes.-
- Me gusta Bianca.-
- A mi también. Lo voy a destacar.-
- Bien...- Le besó la mejilla.
- ¿Qué querías decirme?.-
- Siéntate por favor.- Pidió ella.
- ¿Es algo malo?.-
- No, pero sí importante.-
- ¿Qué pasa?.-
- Quería proponerte algo.-
- Sí, quiero que nos casemos.- Asintió.
- Yo no, no todavía.- Se rió Ella.
- ¿Por qué no?.-
- Tengo issues con el matrimonio. Dame un tiempo y probablemente te diga que sí.-
- ¿Tres meses es suficiente?.-
- No, si nos algún día nos llevamos a casar será cuando este bebé ya tenga un año y no dependa de mi teta para alimentarse.-
- ¿Eso qué tiene que ver?.-
- No voy a dejar al bebé traumado porque no tenía su pecho.-
- Y quiero fotos de él o ella en esa instancia.
Imagínate a alguien pequeño con un vestido o con un mini traje.- Se llevó las manos a la boca.
- Entonces tengo un año y medio para hacerte cambiar de opinión y planear algo.-
- Sí, pero eso no era de lo que quería hablar.-
- ¿Entonces de qué?.-
- Cuando la criatura nazca tendrás que estar a cada momento conmigo, ambos lo hicimos y yo no me voy a llevar toda la responsabilidad y el trabajo...- Él la interrumpió.
- Betty, no tienes que decirme y recalcarlo como si no supiera eso. Tú tendrás lo primordial que son pechos con leche, pero los bebés tienen otras necesidades cómo hacer del baño o ducharse. Es algo en lo que trabajaremos ambos. Si tú no duermes porque a las cuatro de la madrugada le dio hambre yo tampoco lo haré.- Le acarició la mejilla.
- Bien.- Asintió con la cabeza.
- El punto de todo esto es que quizás necesitemos vivir juntos. No quizás, debemos hacerlo. Si no estuviéramos juntos no te lo diría e intentaría llevarlo yo sola, pero estamos juntos. Y la realidad es que tendremos un bebé y no quiero que tengamos que estar todos los días de un lado a otro. Quiero un lugar nuestro, un lugar para los tres. Sé que no estoy apresurando las cosas porque te conozco bien al igual que tú a mi, sabemos que la convivencia nos resulta bien.-
- ¿Me estás pidiendo que me mude definitivamente contigo?. Porque ambos sabemos que en mi apartamento no estaremos bien los tres.-
- No, esta casa es más grande que tu departamento, pero aquí no estaremos cómodos los tres.-
- ¿A qué te refieres?.-
- Está casa tiene dos habitaciones y necesitamos una con cinco.-
- ¿¡Cinco!?.-
- Tu y yo necesitamos oficinas, tú necesitas escribir tranquilo y yo necesito mi espacio para ordenar mis juicios.-
- Ahí van dos, más los dos dormitorios son cuatro. ¿Para que necesitamos una quinta?.-
- Por si algún día decidimos tener otro de estos. Aunque lo dudo.- Señaló su barriga.
- Tienes razón...-
- También quiero otro lugar porque si algún día nos separamos ambos tendremos nuestros propios lugares.-
- ¿Qué opinas?.-
- Concuerdo con casi todo. ¿Entonces me mudo aquí mientras?. Alguien tiene que cuidarte.-
- Si quieres.- Se encogió de hombros.
- Contactaré a alguna corredora de propiedades.-
- V conoce a algunos muy buenos, le pediré el contacto.-
- Y hablando de V... tengo cinco llamadas perdidas de ella y diez de Archie. Envíale el video antes de que entre en una crisis nerviosa.- Se rió ella.
- O mejor les abro la puerta porque están afuera.-

- Ya que no recibimos una llamada o algún video nos vimos obligados en venir.- Dijo el pelirrojo sentándose en el sofá.

Luego de ver el video Archie fue el primero en hablar.

- ¿Por qué sus latidos suenan cómo los de una rata?.-
- ¡Auch!.-
- No sonaba como una rata. Cuando crezcas lo vomitas todo lo que quieras.- Verónica le habló a la barriga de Betty.
- En realidad sí lo hace.- Betty se rió.
- ¿Cómo conocen los latidos de las ratas?.- Preguntó Jughead.
- Cuando niños queríamos ser veterinarios y una vez intentamos curar a la rata que el gato de Archie cazó.-
- ¿Lo lograron?.- Preguntó Jug.
- No, murió a los Cinco minutos, pero Betty hizo un buen trabajo intentando re animarla.- Archie se rió.
- Por suerte llegó el padre de Archie y no me dejó hacerle respiración boca a boca.-

What the wind brings back Donde viven las historias. Descúbrelo ahora