Reunidos en el comedor Jiang, los discípulos hablaban como si acabaran de romper sus votos de silencio eterno, sonreian y comian olvidando todo lo malo de la vida.
- Líder Lan... ¿Cuándo cree que nuestro Líder este en condiciones de volver al mando?
- ¿Cuándo?...
- El otro día, usted dijo que era cuestion de tiempo.
- Lo que dije_
- Pero mira que agallas - dijo Lisa golpeando al discípulo más joven que trató de hablar nuevamente - sabes que por menos podrias morir ¿no?
- Yo_
Lan Xichen sonrio rompiendo la tención que las palabras de Lisa habían formaron - El estado del Líder ha dejado su declive y se podría decir que va mejorando, mas el saber cuando despertara, no podría dar fecha, nisiquiera un aproximado.
- Entonces él_ ¡auch! ¿Por qué?
- Jiang Li eres un verdadero dolor de culo, por qué no te callas ya.
- Yo...
El ambiente volvio a tornarse pesado, todos los discípulos miraban a su Líder suplente temporal con ojos amenazantes y ella se tensaba cada vez más al ver que sus esfuerzos por calmar a Li eran inútiles, mientras más se alteraban, La sonrisa de Lan Xichen era más radiante.
- ¡Maldita sea Li deja de poner esa cara tan lamentable!
- Líder suplente esta vez superó todo límite.
- Li siempre es delicado, lo sabe y aún así hizo que llorara...
- Es verdaderamente cruel con el pobresito.
- ¡Aaaaa! Callense todos.
Iré a terminar con mis deberes, así podre dejar de lastimar a su preciado Li- Escapó roja, quizá por la ira.- ¿Estas bien Li?
- Sí. Yo creo que exagere un poco.
- Nada de eso, fue ella.
- Pero la Líder suplente ha estado bajo mucha presión por el trabajo y yo...
- Olvidalo Li.
- ¿Trabajo? ¿aparte de entrenarlos la Señorita Jiang realiza más labores?
Las discípulas que rodeaban a la joven y agraciada victima empalidecieron, al parecer acavaban de recordar que el Líder Lan estuvo presente todo el tiempo viendo tremendo escándalo. - Demonios - fue lo único que lograron pensar hantes de empalidecer aún más; Había muchas cosas que su Líder podía perdonar, avergonzar a su clan con semejante comportamiento sobre todo frente a un Lan, no era una de ellas. Finalmente una habló, no sin hantes haber agachado la cabeza casi al raz del piso - Líder Lan_ - qué quería decir... lo había olvidado.
- Nuestra Líder se encarga también del papeleo de la secta - habló Li ya calmado.
- Ya veo, la doncella es alguien muy capaz.
- Lo es, ella se ocupa de la mayoria de las labores repartidas entre los cuatro discípulos principales. - dijo, para luego mirar alegre y complacido la sonrisa del Líder Lan.
El almuerzo acabó, cada discípulo se dirigio a sus labores de la tarde, que basicamente era jugar en el lago. Lan Xichen queria ofrecer su ayuda mas se dio cuenta que al no ser miembro de la secta Jiang, no seria correcto inmiscuirse en sus asuntos privados.
Pronto se halló a sí mismo frente a las puertas de la habitación de Líder Jiang, entró y ahí estaba él, profundamente dormido como era usual verlo, se sentó a lado de su cama y las melodias de Liebing empezaron a llenar el ambiente - Ayuda - la música paró, miró por todos lados pero no encontro nada.- Quizá lo imag_
Lan Xichen bajo por refejo la vista a su muñeca, fuertemente aprionada. Qué podia ser ese algo que lo sujeba tan duro, brillaba, chispas purpuras bailaban al rededor de ella.
- ¿Qué? - Al reconocer a Zidian, dirigio al instante su vista a Jiang Cheng, pero este estaba igual que siempre, a excepción de su ceño ligeramente fruncido no había cambios en su estado - Líder Jiang, cómo... - como si su vos fuera el detonante, Zidian apretó aún más su agarre, de pronto ya no estaba en la habitación.
Todo estaba oscuro y silencioso la única cosa que veía era Zidian que con sus chispas de luz marcaban el camino hacia las entrañas de esa oscuridad, parecìa querer guiarlo - Calma te seguire no tienes que apretar tan duro - dijo con una sonrisa adolorida. No pasó mucho cuando distinguio la figura de alguién arrodillado.
Sus ojos se acostumbraron a la oscuridad tremendamente abrumadora. Esa persona parecía no notar su presencia, lucía perdido en sus pensamientos. Lan Xichen se acercó, de repente el panorama cambió de nuevo, ya no había oscuridad ni silencio, en su lugar un paisaje primaveral sumergido en risas infantiles.
Tres pequeñas siluetas se asercaron corriendo, la niña que parecía ser la mayor del grupo sonreía viendo a los otros dos niños que hacian de las suyas.
- Shijie, dile a Jiang Cheng que no es bueno lastimar a los demás, sobre todo a su hermano.
- ¡Tú! callate y deja que te golpeé sabes bien que lo mereces.
La niña reia animadamente, mientras sacaba fruta del cesto que cargaba, los tres comian felíces refugiandose de los fuertes rayos de sol bajo un enorme árbol.
- Es una promesa.
- ¡Promete que lo cuidaras con tu vida!
- ¿Me veo bonita?
- ¡¡Shijie!!
- ¡Hermana!
- ¡¡Wei WuXian!!
- Líder Jiang...
Las voces inundaron el lugar, a la par el hombre en el suelo empezó a temblar. La felíz y pacífica escena se rompió cual baso de cristal, las voces iniciaron muy claras, para luego transformarse en gritos distorcionados. Jiang Cheng abrió grandes los ojos, como si supiera bien lo que seguía cubrió sus oídos desesperadamente.
- Suibian lo reconoció como su señor. No importa qué jamás estaras al nivel del amo Wei.
- Por qué, por qué, por qué, por qué... ¡¿Por qué soy tan inútil?!
Temblaba y se retorcia como si ubiese perdido completamente la razón, su sudor se mesclaba con lagrimas haciendolo ver aún mas deplorable.
- ...
- No quiero esto...
- ... - La melodia de Liebing penetro el ambiente, Jiang Cheng relajo su atormentado rostro e incluso solto algo parecido a un suspiro. El agarre de Zidian se desapareció, y mientras lo hacia se escucharon tenues risitas alegres.
De nuevo, todo lo que se podía ver era la habitación, Lan Xichen logró recuperar su habitual calma para la llegada de Lisa.
- Líder Lan por favor disculpe lo de la comida, es solo que todos esperamos el regreso de nuestro Líder.
- Lo entiendo bien, el Líder Jiang es afortunado de contar con gente que lo estima tanto.
- Es el pilar de nuestra secta, sin él...
- Volverá y muy pronto.
- Gracias, aún siendo ageno a nuestro Líder usted asepto ayudarlo.
- Si puedo hacerlo no dudaré.
*Risitas
- Él jamás pediria ayuda, eso seria demostrar debilidad, aún así nosotros lo hicimos, el día en que despierte será también el último para mi. - Suspiró resignada.
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QUIERO VERTE
FanfictionMuchos meses habían pasado ya, desde el autoconfinamiento del Líder de secta Lan, meses que se vieron interrumpidos por la repentina petición -a la que no pudo negarse- del Líder Jin, que le suplica ayudar a su tio.