7. Emotionless | Especial

970 92 353
                                    

Especial San Valentín

Este capítulo puede que sea el doble o más largo que los otros debido a que es un especial dónde tocaré a una o varias parejas, una enorme recopilación que realmente me gustaría compartir con con ustedes :3.

Los separadores son hechos por mí y únicamente serán usados para éste especial, cada pareja tocada tendrá en suyo de manera personal.

• • • • •

El caos finalmente había terminado, los enfermeros habían regresado por su paciente extraviado. Pero algunas cosas aún no terminan.

—¡Nos vemos, dejé a alguien pendiente! —Shot se despidió corriendo haciendo reír a Deku, pero su sonrisa se esfumó al recordar que él era esa persona.

—¡Demonios, soy yo!

Inmediatamente salió corriendo directo a aquella tienda, debía encontrar a pelusa, tenía poco tiempo ahora que recordaba. Tenía tiempo o eso creía, cuando justo había dado un giro para saltar al otro lado de un edificio, sus aretes parpadearon dándole fin a su transformación.

—¡Carajo! —chilló antes de caer, afortunadamente en un contenedor de lo que serían restos de cartones y plásticos. Algo adolorido se levantó de manera torpe, y de un salto estaba fuera de ahí —. Mala suerte... ¿No crees Yagi?... ¿Yagi?

Tocó su bolsillo y no había nada. Se lanzó nuevamente al contenedor a buscar a su pequeño kwami alzando victorioso a la criaturita al tenerla en sus manos.

—¡Estás bien! —lo apapachó con alegría sacándole una risa al rubio —. ¡Vamos a buscar a Pelusa, me queda poco tiempo!

El kwami se postró en su hombro dándole la señal a Izuku de que podía correr con total libertad. Y así lo hizo.

Había terminado nuevamente en ese feo barrio, esperaba y Pelusa estuviese dónde había quedado la última vez y no tener que iniciar de nuevo. Pero detuvo su carrera, al ver a lo lejos dos melenas blancas juntas. Se regresó curioso pasando sobre un cercado casi destruido.

Era esa misma pequeña de cabellos blancos que jugaba con el gatito. Accidentalmente piso una rama alertando a la menor que volteó rápida pero está vez no se asustó como la primera vez.

Sus ojos brillaron al ver que ese gatito era Pelusa, sonrió al verlo. La pequeña lo miró dudosa y miró al animalito.

Hola... —habló mientras se acercaba con lentitud —. Soy Izuku, y bueno... Ese gatito... Es de una señora y bueno, debo devolverlo...

La sonrisa cálida del pecoso parecía haber calmado a la niña. Ella se levantó con calma y le entregó al peludo, el gato parecía no importarle, era bastante amante a las caricias siendo fácil de tratar. Con una sonrisa recibió a Pelusa acogiendolo en sus brazos.

Gracias — respondió, ella no hizo ningún gesto y se dio la vuelta mientras corría. Deku se quedó mudo, muy confundido por su reacción pero ignoró eso y mejor corrió para llegar a la casa de Pelusa.

Después de haber estado ahí sabía que camino tomar para llegar más rápido. Le quedaba exactamente 15 minutos para que la señora Nagaoka llegara, no quería perder su primer empleo por lo que apresuró su andar.

Corrió esquivando los peatones y periodistas para llegar a la puerta del jardín, hogar del gatito. Suspiró de alivio al ver que estaba como antes, sin rastro de la dueña.

My Miraculous Academia. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora