Habíamos logrado salir del edificio logrando que los fotógrafos y periodistas se exaltaran al ver como una chica misteriosa salía de la mano de Milo Manheim. En un segundo los tuvimos encima de nosotros y yo tanto por el dolor de mi pie como por temor a que me pudieran ver me mantuve aferrada a la mano de Milo y a su espalda. Uno de los fotógrafos intento meter la cámara entre nosotros para tomar mi cara pero gracias al cielo Milo se dio cuenta y lo paro, la única forma que tuve de darle de agradecimiento fue apretarle su mano que estaba entrelazada con la mía, esperaba que el lo hubiera entendido.-Ya puedes quitarte el disfraz – me informo Milo
-¿Seguro que nadie me podrá ver? – pregunte con temor
- No tranquila, no hay ningún fotógrafo cerca – me informo – pero si quieres quédatelo puesto, de todas formas hace algo de frío.
- Creó que es la mejor idea – le di una pequeña sonrisa y me senté a su lado en la banquita, nos encontrábamos en un parque bastante grande. Una gran cantidad de árboles florecidos adornaban el borde de este dando una imagen de tranquilidad, además la luna se encontraba llena por lo tanto emitía una tenue luz que inundaba todo.
El silencio inundo entre nosotros. Milo se encontraba a mi lado pero pareciera que no estaba, se encontraba ido en sus pensamientos o ideas, no tengo ni la menor idea. Y yo no iba ser la que interrumpiera eso, me tenía que acoplar a como era él e intentar llevar esto de la mejor forma, más que más tendremos que fingir que salimos durante largos cinco meses, y se que la idea no es agradable para él ni para mí. O sea a nadie le gusta que le impongan con quien tiene que salir, a pesar de que el me eligió esta presionado por otros, de que tiene que cambiar su forma de ser, pero no le veo ni pies ni cabezas a esa situación. Sus verdaderas fans lo aceptaran tal cual es, no tiene que aparentar algo que no es y menos salir con alguien a quien el no le agrade – en este caso yo – en verdad puedo sentir una mínima admiración por el por soportar esto a cambio de seguir cumpliendo su sueño.
-Creó que ha partido bien la "cita" – pensé en voz alta – Digo, ya te vieron que estas saliendo con alguien...
- Si creó que esta bien – admitió dando un suspiro - ¿Cómo se encuentra tu tobillo?
- Bien, casi ya no duele – moví un poco el tobillo y solo sentí una pequeña punzada, nada comparada con el dolor que sentía antes – Creó que estaré algo coja por unos días.
- Debes tener más cuidado al caminar – dijo en tono serio y con su mirada perdida en algún punto del gran parque.
- Siempre he sido torpe, no creó que se me quite a los diecinueve años – susurré en voz baja, para que nuevamente se colara un silencio entre nosotros. Estaba presa de mis pensamientos cuando en un minutos siento como Milo pasa un brazo por detrás de mi espalda abrazándome y pegándome más a él cosa que me sorprendió y me hizo girarme rápidamente para mirarlo, pero fue, creó, que el primer error. Nuestras narices se estaban rozando y sentía como su aliento chocaba contra mi rostro.
-¿Qué demonios haces? – pregunte entre dientes mirándolo fijamente.
- En la vereda de al frente hay fotógrafos, ahora harás lo que te diga – masculló entre dientes el también
- Creó que ya habíamos pasado la etapa de "Aquí mando yo" – le espete
- Y yo te vuelvo a decir que yo soy el famoso aquí, no tú – dijo con algo de rabia, yo solo puse mis ojos en blanco, este hombre era imposible - ¿Me harás caso?
-¿Me queda de otra, señor ego? – le devolví la pregunta ganándome otra mirada seria de parte de sus ojos avellana oscuros.
- Actuaremos como una pareja coqueta – me susurró – así que no hagas nada estúpido, solo lo que yo te diga.
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The Choice Adaptación (Milo y tu)
FanficSinopsis. ¿Qué harías si por equivocación entras en un juego de citas? ¿Tener que salir por obligación con alguien, ya que tu amiga firmo un contrato? Todo empezó ese sábado en que seguí a mi mejor amiga a una de sus tantas locuras, entre en un con...