Capitulo 14 Decepción

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La llamada de su ahora novia le había alegrado la mañana, pero también lo había desconcertado ¿tendrían una cita en un supermercado? aunque algo loco le pareció ingenioso, así que a la hora de la comida no tardo en salir rumbo a donde lo había citado Mina. Al estacionarse le llamo para preguntarle donde estaba y efectivamente estaba en la estrada del super, como siempre tenía que estar demasiado formal en la oficina decidió que sería algo inapropiado por lo que dejo el saco en el auto eso le dio un toque más casual. En cuanto llego pudo ver a su conductora estrella esperándolo.

—Hola brujita... —murmuró al tiempo que besaba sus labios en un cariñoso saludo.

Le sonrió al verlo acercarse se había quitado sus gafas de sol para poder contemplarlo mejor— Te extrañe —lo abrazó sin pensarlo dos veces mientras correspondía su beso— ¿Estabas ocupado? ¿Interrumpí algo importante?

—No y no —sonrió abrazándola— estaba aburrido terminando unos planos y lo más importante que puedo hacer ahora es comer con mi linda novia. Solo que no creo que nos vayamos a llenar de muestras gratis del super

Rio mientras bajaba sus manos acomodándole el cuello de la camisa que había removido un poco con sus brazos— Vaya eres de buen apetito, sabes solía llenarme de muestras gratis cuando era estudiante, qué tiempos aquellos —suspiró— bueno, aunque con lo guapo que eres igual y nos dejan la bandeja completa ¿no crees?

—Si es posible, pero creo que es más fácil comprar todo y hacer un pequeño picnic en el parque ¿Qué te parece?

—Realmente me encantaría —le sonrió con la cara llena de dulzura ante su romántica idea— pero, Dios es que ya casi no tengo tiempo y aún falta todo —miró su reloj sorprendiéndose por la hora, tomo su mano prácticamente jalándolo hacia la tienda.

—¿Falta todo para qué? —dejo que lo jalara, sonriendo por lo bien que se veía de ama de casa—

—Tengo que comprar vasos de cristal, una vajilla nueva —pensaba— cubiertos no —movió su cabeza— Carne, verduras, pasta y ah sí un delicioso pastel —saco de su bolsa la lista que había hecho previamente.

—¿Acaso mi brujita piensa seducirme con una romántica cena?, si es así no era necesario que me trajeras o quieres que yo elija lo que voy a comer —dijo divertido al verla tan en papel de ama de casa y además olvidadiza.

Volteó a verlo, pues había olvidado que no le había dicho nada ya que quería sorprenderlo lo cual quedo descartado cuando lo cito en ese lugar y supo lo perdida y atolondrada que estaba por ese hombre— Te amo —sonrió cayendo en cuenta lo despistada que estaba— Y sabes eso de la cena romántica es otra excelente idea que te daré muy pronto solo que el postre no será precisamente el pastel... —le guiño un ojo.

—Temo que he creado a un monstruo insociable —murmuró cerca de su oído— lo cual me parece demasiado tentador —le sonrió al separarse— ¿y entonces para quien es esta cena? parecer demasiado misteriosa

—Veras, planeaba decírtelo más tarde, pero creo que hice todo al revés —sonrió apenada— Mañana habrá una reunión importante para mí y me gustaría que estuvieras conmigo

—Vaya pues por tu seriedad y el énfasis que pones debe ser sumamente importante —comenzó a caminar llevando él el carrito del super— ¿y de que se trata esa cena?

—Vendrán mis padres y los padres de Seiya a visitarnos —sonrió sutil mientras lo veía esperando su reacción.

—Ah muy bien —murmuró volteando a verla— ¿y quieres que vaya?

—Si —murmuró— No quiero que pienses que te estoy presionando a conocer a mis padres por formalidad o algo parecido, solo que rara vez vienen y seria lindo que te conocieran

Estrellas y Una ApuestaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora