Clementine TWD

¿Qué es ser una buena persona?

Lee había encontrando por fin una salida de el cuarto de carnes frías, por lo que al final se decidió que Clem tenía que salir por esa pequeña salida, ya que era la única que cabía por el pequeño espacio.

-Clem, yo se que puedes con esto sé valiente-las palabras de Lee fueron bastante confortables para la pequeña. Clem había olvidado lo que hace unos minutos había pasado, teniendo a Lee como una persona que sólo hace lo necesario para proteger a todos.

El momento de ser valientes había llegado para la pequeña de pelo alborotado, quien se metió dentro del ducto de ventilación y gateo hasta ver la salida, al bajar su cuerpo se congeló de nuevo.

La sala estaba repleta de sangre y utencilios manchados de el líquido rojo ya tan conocido, parecía como si alguien hubiera echado pintura  roja en toda la sala, pronto las ganas de vomitar llegaron hasta la pequeña, quien agradeció haber desechado todo ya.

AJ no pudo evitar retroceder asustado ante la imagen tan aterradora del cuarto, había visto a el "palmazo" convertirse en un caminante y había incrustado no una, si no, varias balas en el rostro de Lily, pero nunca había visto una habitación como esa.

Por otra parte la reacción de los otros chicos no fue tan diferente, a todos les cruzó por la mente una vez más que Clementine era tan diferente a ellos, por el simple hecho de las cosas que ella tuvo que ver siendo una niña.

Las piernas le temblaban y tenía miedo de que alguien la fuera a descubrir y de inmediato la cortara en pedazos con la cierra eléctrica que había ahí, pero se obligó a seguir, ella le había dicho a Lee que podía, en ese caso, debía cumplir con lo que decía, tal vez, algún día podría llegar a ser tan confiable como lo era Lee.

Justo al momento de bajar, sus ojos presenciaron con terror la figura de uno de los hermanos St.John, más precisamente la silueta de Danny el hermano menor. Del susto no pudo evitar que un leve gemido saliera de su garganta sin consultarlo con su cerebro antes. Fue ágil y se escondió, logrando desviar la atención de Danny en otra cosa y no en ir a revisar el cuarto ensangrentado.

Tan rápido como pudo y en silencio, se aproximó hasta la puerta del cuarto para carnes frías y abrió la manija. Tan pronto como abrió sintió un abrazo protector proveniente de el moreno que le preguntaba agitado y miedoso sobre su bienestar.

-Estoy bien Lee.

-Ok, puede que lo que haya dicho en primera instancia sobre Lee, puede que lo haya juzgado antes de tiempo-comentó Louis sintiéndose un poco apenado por reaccionar de esa manera, si Lee fuera un peligro para Clem, la chica no habría llegado tan lejos.

-Te perdono-respondió tajante el pequeño AJ, lo cual le causó gracia a Ruby y Violet.

-Ya lo oíste Louis, te perdona-se burló la rubia, Louis sonrió a medias, le gustaba crear un buen ambiente aunque estuvieran en un mundo de mierda.

-Bien, Clem por ahora quédate con Lily y Mari ¿si? Kenny y yo iremos por Katjaa y Duck-ordenó el moreno, aunque al ver la cara algo molesta de la chica agregó-cuida de Lily, no se siente bien...-no terminó pues la castaña le lanzó una mirada de odio puro.

Pronto Clem sintió como alguien le jalaba la manga, al voltear confundida, encontró a una Mari avergonzada.

-Sé que dije que madurarás, pero creo que lo estás haciendo muy rápido-respondió la chica con las mejillas rojas. La de pelo negro sonrió, esa era la forma de Mari para decir un "lo hiciste bien".

-Por supuesto que ella es rápida, porque es perfecta-comentó una orgullosa Violet.

-Si Vi todos sabemos que Clem lo hace bien y rápido en la cama, pero no presumas pan delante de los pobres-se mofó Louis sabiendo muy bien que Vi se las cobraría después, pero por el momento había logrado su objetivo, la rubia estaba roja como un tomate.

AJ estaba preparado para preguntar por lo que dijo Louis, más Violet se volvió, dejando de maldecir al moreno con la mirada y con una velocidad abismal pronunció un-¡No preguntas!

Pasaron unos minutos antes de que Lily  dejara el cuerpo de su padre y comenzara a caminara hasta la salida, se detuvo esperando a que las dos chicas le acompañaran y continuaron con el camino hasta llegar al granero, donde por segunda vez, Clem miraba horrorizada las acciones de Lee.

El moreno había atravesado el pecho de Danny con un trinchero, el hombre ya no era una amenaza como lo era Larry que estaba apunto de convertirse, pero lo que más asustó a la niña, es que no había signo alguno de arrepentimiento en el rostro de Lee.

-Creo que se le zafó un tornillo-comentó un shockeado Assaim.

-Está vez te apoyo-continuó Ruby negando con la cabeza.

Clem sintió el leve temblor de Mari, ésta vez, tal parece que las acciones de Lee habían logrado asustar a la de ojos grises. En cuanto a Lily ella sólo apartó la vista de la escena con decepción.

Cuando el moreno se dio cuenta de la presencia de las chicas, ya era tarde, estuvo a punto de dar una explicación de no ser porque el grito de la esposa de Kenny inundó el lugar.

-Lily, cuida de Clementine y Mari, iré a ayudar a Katjaa-pidió el moreno que al parecer no importaba cuanta gente matara, para él lo más importante siempre iban a ser las niñas.

En ese momento Clem vio que probablemente Lee no siempre tenía la razón en todo lo que hacía y también podía dejarse llevar por sus sentimientos más oscuros.

-Clem, Mari, no se preocupen...Lee sabe lo que hace-comentó la castaña abrazando a las dos chicas temblorosas.

-Las personas malas no siempre fueron de ese modo-comentó débilmente Ruby, tenía que admitir que había una gran diferencia entre la Lily de los recuerdos de Clem y la Lily que ella conoció. La castaña no siempre fue mala, era una buena líder que se preocupaba por su grupo y por su padre, e incluso gastaba su preocupación en dos niñas que no eran nada de ella. Aunque un mundo como este puede acabar hasta con la persona más amable y cuerda.